La extensión del eucalipto en territorio gallego ha sido imparable en los últimos treinta años, hasta el punto de que esta especie ocupa ahora el doble de superficie que en 1986. Su crecimiento ha sobrepasado incluso las previsiones de la propia Xunta. En el vigente Plan Forestal -que ahora está en proceso de revisión- se estimaba que las plantaciones de este tipo de árboles alcanzarían las 245.000 hectáreas en un horizonte que llega hasta el año 2032. Sin embargo, esa cifra está ya a estas alturas superada. Según los datos de la Consellería do Medio Rural, Galicia cuenta con 425.000 hectáreas de eucaliptos -288.000 hectáreas de masas compuestas exclusivamente por esta especie y otras 145.000 mezcladas con pino y roble-.

Esto significa que se plantaron 180.000 hectáreas por encima de lo previsto en la planificación forestal de la Xunta, un 76% más. Y de ahí que la Consellería de Medio Rural quiera poner límite a las nuevas plantaciones. Su objetivo en el nuevo Plan Forestal que prepara es reducir o mantener las superficies de eucalipto, pero no aumentarlas.

La planificación actual data de 1992 y tenía una vigencia de cuarenta años. En ese momento no se veía el eucalipto como una amenaza y el documento, lejos de fijar límites a las plantaciones de esta especie, buscaba potenciar la producción maderera, incluida la de este árbol de origen australiano. Este plan, que fue aprobado con el consenso de todos los grupos políticos, diseñó una política forestal en la que el eucalipto tendría una superficie estimada de 245.000 hectáreas.

Pero se quedó corto. Medio Rural reconoce que esa cifra fue ya superada hace veinte años y ahora mismo se sitúa un 76% por encima. La razón, según argumentan, es que hubo una mayor demanda de eucalipto de la "inicialmente esperada" debido a que se trata de un cultivo "de rentabilidad muy elevada y muy atractivo para los propietarios forestales". En cualquier caso, desde el departamento que dirige Ángeles Vázquez aclaran que la Xunta no subvenciona estas plantaciones desde hace veinte años y añaden que la cifra de 245.000 hectáreas que fijaba el Plan Forestal era una "estimación", no "una norma ejecutiva", de manera que haber superado en un 76% lo recogido en su planificación no implica un incumplimiento o una ilegalidad, aunque sí una llamada de atención que obliga a Medio Rural a "regular este cultivo".

La Lei de Montes de 2012 prohibió plantar eucaliptos en terreno agrícola, en los márgenes de los ríos, en la proximidad de las casas y también establecía limitaciones para el cultivo en Red Natura. En las Directrices da Paisaxe, que prepara la Consellería de Medio Ambiente, se establece también el veto a nuevas plantaciones de eucalipto en las áreas de especial interés paisajístico, que ocupan casi el 10% del territorio.

Pero además Medio Rural ultima ahora un nuevo decreto para regular esta especie, que se encuentra en fase de alegaciones. Esta norma prohíbe reforestaciones y nuevas plantaciones de eucalipto en bosques de árboles autóctonas. Y amplía el veto a aquellas masas donde haya mezcla de frondosas con eucalipto, cuando el porcentaje de individuos de esta última especie sea inferior al 30%.

Y en el resto de los casos el decreto establece que solo se permitirán reforestaciones y nuevas plantaciones cuando así lo establezcan los planes de ordenación de cada distrito forestal. Esto, en la práctica, significa que en un tercio de la comunidad no se podrá plantar eucaliptos. Queda prohibido en la mayor parte de la provincia de Ourense y el sur de la montaña de Lugo. "Se busca preservar la identidad forestal de aquellas zonas en las que apenas hay eucalipto o esta especie tiene escaso rendimiento económico, es decir, en aquellas áreas donde no hay tradición de este cultivo, especialmente en el interior de la comunidad.

"No es una prohibición genérica, sino una ordenación", aclara la Xunta. En Portugal, sin embargo, se ha fijado una moratoria a la plantación de eucaliptos en todo el territorio.