El tren de alta velocidad es desde hace una década el puntal de las inversiones del Estado en Galicia, que ve como año tras año se lleva millones de euros para construir la línea que en el tercer trimestre de 2019 -según el último calendario oficial- permitirá conectar por AVE las ciudades de A Coruña o Vigo con Madrid.
Y aunque las grandes partidas están llegando a su fin, el ferrocarril sigue capitalizando el gasto del Gobierno central. En la cuentas de este año sigue la misma tónica y la inversión en el tren de alta velocidad supondrá el 52% del total. De los 924,6 millones presupuestados, 481 se destinarán a las obras del AVE, de los que la mayoría están asignados al tramo Lubián-Ourense, para los que hay reservados 462 millones.
Si se suman las partidas reservadas para el AVE en Zamora y Valladolid, la línea que da continuidad desde Galicia hasta Madrid, entonces el presupuesto se acerca a los 749 millones de euros. El Ministerio de Fomento -que gestiona más del 90% de todas las inversiones- asegura que Galicia es la tercera comunidad con mayor presupuesto destinado al tren de alta velocidad, lo que permite garantizar su entrada en funcionamiento en el tercer trimestre de 2019.
En todo caso, el gasto presupuestario es casi un 40% inferior al aprobado el año pasado, cuando se superaron los 773 millones en territorio gallego.
Para la variante de Ourense, el tramo más retrasado de la línea y que no estará listo en 2019 -los trenes utilizarán de forma provisional la vía actual-, Fomento asigna solo un millón de euros, la misma cantidad que destinará a completar la tramitación ambiental del trazado por Cerdedo entre Vigo y Ourense, que lleva años sin pasar del diseño sobre el papel.
Para el conjunto del ferrocarril, contando las actuaciones en las vías convencionales y la renovación de equipos, el Gobierno ha reservado 571 millones de euros, entre los cuales figuran más de 24 millones para impulsar la conexión con el puerto exterior de Ferrol.
La Xunta se ha declarado satisfecha con las cuentas del Ejecutivo de Mariano Rajoy y singularmente con las del Ministerio de Fomento. Sin contar con las inversiones del resto de áreas, el Gobierno de Feijóo sostiene que Galicia es la segunda autonomía mejor parada en gasto por habitante de Fomento y que sus casi 900 millones disponibles suponen un 53% más que los fondos que fueron ejecutados en 2016.
Según los datos facilitados por la Xunta, Fomentó gastó el pasado año un total de 585 millones de euros, de los que 335 corresponden al ferrocarril, 125 a carreteras o 79 a puertos. Además, el Ejecutivo autonómico señala que si se suman las inversiones extrapresupuestarias, entonces el global superaría los 1.000 millones. En este apartado se incluyen los 138 millones que se ejecutarán a través de la concesionaria de la Autopista del Atlántico para ampliar la AP-9 en Santiago y en Vigo.
"El Gobierno de España mantiene la voluntad de corregir a través de las inversiones consignadas el déficit de infraestructuras en Galicia, así como de avanzar conforme a las prioridades trasladadas por la Xunta", valora el departamento autonómico.
En el apartado de infraestructuras viarias, el Ministerio de Fomento tiene previstos 171 millones de euros, de los cuales 125 son para creación de nuevas carreteras, como la continuación de la autovía entre Santiago y Lugo, para la que hay 56 millones destinados a impulsar los tres tramos pendientes o la circunvalación de Pontevedra (18 millones). A estas inversiones se suman otras relacionadas con la A-54 como es su conexión con la AP-9 en Santiago, en el conocido como enlace orbital (fase A), para el que se reservan cinco millones para este ejercicio. También habrá 2,26 millones para el intercomunicador entre la A-54 y la N-540 en Guntín. En la A-56, la autovía entre Ourense y Lugo, se incluyen 10 millones para el tramo San Martiño-Enlace de Barrela (de casi 10 kilómetros). Se reservan además 3,7 millones para la variante Norte de Ourense.
Otras entidades del sector público empresarial que reservan partidas para las provincias gallegas son Aguas de las Cuencas de España (Acuaes), con algo más de 21 millones (1,74 en A Coruña, 2,55 en Ourense y 16,77 en Pontevedra) y Enaire -la matriz de Aena-, que presupuesta siete millones para los aeropuertos de A Coruña y Santiago y 2,7 para el de Vigo. Otra de las partidas más destacadas es la referente a los puertos, para los que hay 72,8 millones de euros. La dársena exterior de A Coruña se lleva casi un tercio y el Consorcio Zona Franca de Vigo algo más de 26 millones.
