El PSdeG pidió ayer que la Xunta elevase la capacidad de gasto de los presupuestos para 2017 en 60 millones para "atender a las personas más vulnerables", pero el PP lo rechazó porque, según argumentó, las partidas de gasto social que proponían incrementar los socialistas o son ampliables o se pueden modificar y, por tanto, "no es necesario reformar" las cuentas.

De esta forma, y pese al apoyo de En Marea y el BNG, la toma en consideración de esta proposición de ley no salió adelante en el pleno del Parlamento. "Endeudarse más no va en la línea del crecimiento sano", justificó el portavoz de los populares en la Cámara gallega, Pedro Puy. En el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del pasado 1 de diciembre, el Gobierno central logró la aprobación por parte de las comunidades del objetivo de déficit para este año, que quedó fijado en el 0,6%.

Una décima adicional -la previsión inicial era del 0,5%- que a Galicia le confiere la posibilidad de disponer de esos 60 millones adicionales durante este ejercicio.

La diputada del PSdeG Begoña Rodríguez Rumbo advirtió, tanto en su primer turno como en el de cierre, de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, dijo en sede parlamentaria que "él se comprometía a traer esta reforma de la ley para alcanzar ese techo de gasto".

En su intervención, Rodríguez Rumbo destacó que su propuesta persigue que la Administración autonómica pueda "atender cuanto antes necesidades que existen hoy y ahora". En concreto, los socialistas planteaban que la partida para la renta de integración social (Risga) pasase de contar con 57 millones a 86,5 y subir hasta 73,3 millones la del servicio de ayuda en el hogar de la dependencia (14 millones más), entre otras modificaciones.

Pedro Puy reivindicó que "el compromiso" del PP con el gasto social está "fuera de toda duda", y rechazó tener que modificar los presupuestos para ampliar partidas como las mencionadas por los socialistas, que, según dijo, o son ampliables (como la Risga) o se pueden cambiar "con los mecanismos de modificación de crédito".

Puy atribuyó "cifras que no coinciden" y alguna cuestión "incoherente" en la proposición de ley del PSdeG, y culminó insistiendo en que "no es necesario reformar el presupuesto para incrementar el gasto social" y que el PP no es partidario de subir el endeudamiento.