Visión doble, menor campo visual, ralentización de los reflejos, alucinaciones, euforia... Son algunos de los efectos del consumo de alcohol o drogas al volante. Pese a las campañas de concienciación y al refuerzo de la vigilancia, Galicia se mantiene entre las comunidades con más denuncias por conducir en estado ebrio o bajo los efectos de alguna sustancia estupefaciente. En tan solo una semana, los agentes de la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico realizaron en las carreteras gallegas casi 18.600 pruebas de alcohol y un total de 141 de drogas. Los resultados: 207 conductores denunciados por tomarse una copa de más y 91 por haber consumido cannabis, cocaína o anfetaminas, entre otras sustancias. O lo que es lo mismo, cada día una media de 30 conductores son sorprendidos bajo los efectos del alcohol en las carreteras gallegas y otros 13, de las drogas.

El balance del dispositivo especial de vigilancia de la semana pasada en Galicia revela un ligero descenso en los positivos por alcoholemia, pero un repunte de casi 27 puntos en el caso de los narcotest positivos. Los datos de la accidentalidad en la comunidad del año pasado son alarmantes, según revela un estudio pionero realizado de forma conjunta entre el Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) y la Agrupación de Tráfico: uno de cada tres conductores responsables de un accidente mortal en la comunidad el año pasado -bien fallecido o herido- dio positivo en alcohol (no solo había bebido sino que la tasa estaba por encima de 0,25 mg/l) o había consumido alguna sustancia estupefaciente.

Pontevedra y A Coruña son, por este orden, las provincias gallegas con la tasa más alta de infractores por ponerse al volante en estado ebrio o tras haber consumido alguna droga, según el balance de la campaña de la semana pasada. Por encima del 1,11% registrado en la comunidad -207 denunciados de un total de 18.573 vehículos controlados-, se quedan las dos provincias atlánticas. A la cabeza, Pontevedra con un índice de denuncias por alcohol o drogas del 1,63% -84 sancionados de los 5.130 conductores sometidos a la prueba la semana pasada-. En el caso de A Coruña, la tasa roza el 1,4% -81 denuncias de más de 5.800 automovilistas que tuvieron que soplar en los controles de la provincia-. Y con cifras muy inferiores, le sigue Lugo (0,37%), donde se abrieron 18 expedientes sancionadores de un total de 4.790 vehículos controlados. Y, finalmente, Ourense (0,86%), con 24 denuncias de los casi 2.800 conductores sometidos a la prueba de alcoholemia.

En el caso de los positivos por conducir bajo los efectos del alcohol, la tasa pasó del 1,18% registrada en la campaña de junio del año pasado al 1,11% del dispositivo puesto en marcha del lunes de la semana pasada al domingo. Pero las denuncias por consumo de drogas se dispararon. Y si el año pasado los positivos rozaban el 40% de los narcotest realizados, en la actualidad ya alcanza el 65%: 91 conductores denunciados en las carreteras gallegas de los 141 controlados en una semana. También en drogas, Pontevedra y A Coruña son las provincias gallegas con el mayor índice de infractores, un 81% y un 70,6%, respectivamente. De las 51 pruebas realizadas en las carreteras coruñesas, 36 dieron positivo. Y en las vías pontevedresas fueron interceptados bajo los efectos de las drogas 30 conductores de los 37 sometidos a control. Les sigue en la lista autonómica, Ourense con una tasa de denuncias de casi el 58% (11 expedientes de 19 conductores que realizaron el narcotest). Y finalmente Lugo, con un índice del 41,2% (14 positivos de 34 pruebas).