Las previsiones de la Xunta y de Aemet hacen prever que no solo se mantendrá la prealerta por sequía sino que tendrá que decretarse la alerta por falta de agua. No se espera un verano con tantas precipitaciones que permitan recuperar el nivel de ocupación medio para esta época del año. Para analizar cuál es la situación y ver qué medidas se deben adoptar, la Oficina Técnica da Seca se reunirá el próximo mes de julio.

En el encuentro, los integrantes del organismo, compuesto por personal de la Consellería de Medio Ambiente, Medio Rural, MeteoGalicia y la Axencia Galega de Emerxencias, evaluarán la posible activación de la alerta por sequía de mantenerse la actual situación meteorológica.

"Las lluvias de mayo permitieron una leve recuperación en los caudales de los ríos, aunque aún están lejos, con carácter general, de alcanzar valores de normalidad", reconocen desde el departamento que dirige Beatriz Mato. Aunque esta semana se caracterizará por una bajada generalizada de las temperaturas y precipitaciones puntuales de pequeña intensidad, el verano tendrá un nivel de precipitaciones normal para esta época del año, por lo que se esperan pocas precipitaciones durante los próximos meses.