Galicia cerró 2016 con un cambio de tendencia en la accidentalidad en carretera. Por primera vez en doce años, las estadísticas de la DGT registraron un aumento de los fallecidos en la red viaria gallega. El balance de este año va camino de cerrarse de nuevo con un descenso de los siniestros mortales en Galicia. Entre enero y julio, los accidentes ocurridos en las carreteras gallegas dejaron un total de 46 fallecidos, 16 menos que los contabilizados en el mismo periodo del año pasado, según datos de la Dirección General de Tráfico.

Este balance coloca a Galicia como la comunidad que, en cifras absolutas, protagonizó el mayor descenso de víctimas mortales. Y en porcentaje es la segunda (-26%), por detrás de Navarra (-38%). Ahora bien, está última registró un número mucho más bajo de fallecidos: ocho en los primeros siete meses del año frente a los 13 del ejercicio pasado.

En lo que va de año, Galicia y otras siete autonomías -Navarra, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia- lograron reducir el número de muertos en sus carreteras. En el conjunto del país, el descenso apenas llega al 1%, con un total de 673 fallecidos, seis menos que el mismo periodo de 2016.

En el otro lado de la accidentalidad están nueve comunidades que contabilizaron más muertos en carretera que los siete primeros meses del año pasado. A la cabeza del incremento están Madrid, con un repunte del 65% -48 víctimas mortales frente a las 29 de 2016- y Aragón, con un aumento del 50% -30 fallecidos, diez más que de enero a julio del ejercicio pasado-.