La Consellería de Medio Rural daba por controlado este mediodía el incendio que afectó a casi 1.400 hectáreas entre los municipios de Verín y Vilardevós. Se da así un paso más para la extinción del mayor fuego registrado este año en Galicia. Las llamas comenzaron el pasado jueves y obligaron a decretar la Situación 2 durante varías horas así como a cortar el tráfico en la A-52 y la N-525.

Ahora, además de trabajar en la extinción del fuego, se investiga la autoría del mismo. A finales de julio, los brigadistas de la base de helicópteros de Vilamaior, en Verín, sofocaron tres conatos de fuego, en el mismo lugar en el que el, pasado jueves, se desataba un voraz incendio que calcinó cerca de 1.400 hectáreas en esa parroquia verinense y en Vilardevós, en el que es ya el fuego más devastador del verano en Galicia.

Esos primeros conatos, claramente provocados en días previos al macroincendio, no prosperaron entonces, porque no había unas condiciones de viento propicias para avivar el fuego y los propios brigadistas de la base pudieron sofocarlos, en dos ocasiones con medios de tierra y en el otro tuvieron que utilizar el helicóptero de la base para poder atajarlo.

Sin embargo esta repetición de conatos en apenas unos días y en el mismo punto, es una de las pistas que permiten segurar, sin ningún género de dudas, a la conselleira de de Medio Rural Ángeles Vázquez que el incendio de Vilamaior fue provocado.

Dos sospechosos

Por ahora no hay datos sobre la identidad del posible autor pese a que ayer circuló con fuerza que hay ya dos sospechosos del incendio de Verín, un dato que no ha sido confirmado ni desmentido hasta ahora por ninguna de las fuerzas de seguridad consultadas ni por la Xunta.

Mientras se sigue esta nueva línea de investigación, brigadas y medios del ejército continúan en las zonas afectadas por el fuego sobre todo en los núcleos de Queirugás en Verín, donde la proximidad a las casas obligó a activar el jueves la alerta 2, como en Osoño y otros núcleos de Vilardevós. No hay llamas, pero vigilan ante la posibilidad de que alguna racha de viento pueda reavivar posibles rescoldos en las cortezas de los arboles.

En estos momentos según la Xunta sigue desactivado el nivel dos de alerta en la parroquia de Vilamaior de Verín ya que no hay peligro para los núcleos de población de la zona afectada.

Según el balance realizado ayer por Medio Rural hasta ahora llevan trabajado en el operativo de extinción de este fuego cinco técnicos, 58 agentes, 104 brigadas, 68 motobombas, seis palas, 18 helicópteros y nueve aviones. También colaboraron efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), del Grupo de Emergencia Supramunicipal (GES) de Laza y bomberos comarcales de la zona.