Las quejas de los pasajeros el día en que se estrenó el nuevo plan de transporte de la Xunta, con más de 750 líneas, provocó un reguero de incidencias. Los usuarios salieron el martes a las estaciones de buses y a las paradas sin saber qué servicios seguían operativos y la frecuencia. Ante esta situación, la Consellería de Infraestruturas exigió a las concesionarias que publicitasen los horarios de las nuevas rutas, y se encargará de velar por el cumplimiento de la circular que les remitió tras la puesta en funcionamiento de los nuevos servicios. Así, la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, advirtió ayer de que su departamento ya está realizando las "inspecciones precisas" para que se cumplan las condiciones acordadas con el objetivo de "mejorar los servicios, mejorar la información al usuario y que sea más barato".

Mientras se celebraba en Santiago la primera reunión de la comisión de seguimiento del plan de transporte, a la que acudieron representantes de patronal, sindicatos y Xunta; Vázquez acudía a Betanzos a supervisar las obras de rehabilitación de edificios del caso histórico. En la visita, la conselleira advirtió de la "obligación indiscutible" de las empresas de hacer un seguimiento de los horarios ante las quejas por algunas incidencias que desde la Administración autonómica calificaron de "puntuales".

Las quejas de los usuarios el primer día en que entró en funcionamiento el nuevo plan del transporte, que incluye unas 10.000 paradas y 5.000 horarios, llevaron a la Xunta a enviar una circular a las concesionarias para que publicitasen rutas y paradas. Desde la Xunta reiteran que el nuevo plan de transporte tendrá éxito si Ejecutivo autonómico, concellos y empresas trabajan juntas "para resolver las incidencias".

Comisión de seguimiento

Sobre la reunión de la comisión de seguimiento del plan de transporte mantenida ayer, la primera tras el acuerdo con CCOO y UGT, la conselleira destacó que se celebra para "blindar que se cumplan los acuerdos", entre ellos los relativos al cumplimiento de las obligaciones en materia de empleo por parte de las empresas en la subrogación de trabajadores y la estabilidad laboral. El acuerdo, según destacó Vázquez, "blinda y deja claras las subrogaciones", tras las denuncias de los últimos días de los sindicatos sobre los incumplimientos por parte de algunas compañías, informa Europa Press. En este sentido, advirtió de que quien no cumpla podría ver resuelto su contrato.

Desde el PSdeG, el diputado Abel Losada responsabilizó a la Xunta del "mal funcionamiento" del plan del transporte debido a su "cabezonería" al "ejercer el poder caiga quien caiga", según cuestionó. Sobre los problemas surgidos esta semana, advirtió de que "es la crónica de un lío anunciado por los socialistas". "Se hizo sin tener en cuenta a los agentes interesados, con un plazo para los ayuntamientos ridículo", sentenció Losada, al tiempo que insistió en que el plan no ayuda a paliar "las dificultades objetivas" de comunicación que hay en las "zonas más complejas" donde "es más difícil tener un sistema de transporte competitivo".

El portavoz de En Marea, Luís Villares, también cuestionó el plan de transporte de la Xunta, a la que acusa de estar "ebria de mayoría absoluta". El exjuez emplazó al Ejecutivo autonómico a ir "al otorrino" para "revisar" sus problemas "de oído" y "retomar el diálogo" y renegociar el plan de transporte.