Se vuelve a pisar más de la cuenta el acelerador. Uno de cada cuatro conductores reconoce que excede los límites de velocidad de manera frecuente, casi el 40% circula por encima del máximo permitido y hasta un 13% supera el tope en más de 20 km/h en carreteras secundarias. El balance de la campaña de control de Tráfico de la semana pasada confirma el aumento de las infracciones por no respetar el 120 km/h en autopistas y autovías, el 90 y 70 km/h en carreteras convencionales o el 50 en travesías. Entre el lunes y el domingo pasados, las patrullas de Tráfico de la Guardia Civil interceptaron en Galicia a 3.990 conductores por encima de la velocidad permitida, lo que supone una media de 570 cada día y dos tan solo cada cinco minutos. La tasa de infracciones por sobrepasar los límites en las carreteras gallegas roza el 4,5% frente al 3,5% de la campaña de velocidad de agosto del año pasado, lo que supone un 30% más que las denuncias interpuestas en la campaña de hace un año.

Aunque los controles se reforzaron durante este operativo, un 27% más -se pasó de los casi 70.600 de hace un año a cerca de 89.000 hace una semana-, las denuncias se dispararon más de un 60% -3.990 la semana pasada frente a las 2.451 de agosto de 2016-.

La campaña puesta en marcha la semana pasada se centró en las carreteras convencionales, ya que son éstas las que registran una mayor accidentalidad. Más del 90% de los siniestros mortales ocurridos en Galicia se producen en este tipo de vías. En la red secundaria, los infractores conducen por encima de los 90 kilómetros por hora incluso en zonas limitadas a 70. Y en tramos donde no se puede sobrepasar los 50 kilómetros por hora, los más temerarios al volante ponen su vehículo por encima de los 80 km/h.

Provincias

Casi el 70% de los controles de velocidad realizados la semana pasada se concentraron en las provincias de A Coruña y Pontevedra. Solo en esta última, las patrullas de la Agrupación controlaron a más de 33.500 vehículos, casi el 40% de los vigilados en toda la comunidad. Sin embargo son estas dos provincias las que tuvieron la tasa más baja de denuncias por exceso de velocidad.

En el caso de A Coruña, el índice es del 4,2%, casi tres décimas por debajo de la media autonómica (4,48%) ya que de los casi 27.000 vehículos sometidos a control, 1.152 fueron denunciados (casi el 30% del total de Galicia). Pero es Pontevedra la que registra la tasa más baja, con un índice de infracciones por velocidad del 2,9%, con un total de 988 automovilistas denunciados (cerca del 25% de la comunidad) de los más de 33.000 controlados en la provincia.

En el extremo opuesto de la tabla están Lugo y Ourense con una tasa de denuncias por exceso de velocidad por encima de la media autonómica. En ambas provincias, el índice de infracciones supera el 6%. Por pisar más de la cuenta el acelerador fueron denunciados en Lugo 1.374 conductores de los 20.680 controlados. Un balance de sanciones que supone casi el 35% del total en la comunidad. Aunque la cifra es menor en Ourense, 476 denunciados, la cifra de controles es mucho más bajo -7.735-, lo que se traduce en una tasa infractora del 6,15%.

El exceso de velocidad es la infracción más frecuente cometida en las carreteras gallegas. Más del 70% de las multas por infracciones al volante son por pisar más de la cuenta el acelerador, seguidas del consumo de alcohol, una de las lacras de la accidentalidad viaria a la que en los últimos años se ha sumado el consumo de drogas. Y como tercera infracción más habitual en carretera está la no utilización del cinturón. Casi el 30% de los muertos el año pasado en siniestros de tráfico en Galicia viajaban sin el dispositivo de seguridad.