A pesar de que no es una novedad que introduzca la Lei de protección e benestar dos animais, el recordatorio de que es responsabilidad de los concellos el recoger a los animales domésticos que estén abandonados o perdidos en sus calles que hace esta norma despierta recelos en la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp). Los ayuntamientos consideran que un mayor número de competencias tiene que venir acompañado de una dotación económica que permita hacer frente a los costes derivados. La Consellería de Medio Ambiente, responsable de la nueva normativa, rechazó en un primer momento la petición de la Fegamp de incluir la financiación de estas tareas en la normativa, pero hizo pública en agosto una convocatoria de ayudas con este fin, con base a la ley vigente de protección de animales domésticos, de 1993, que ya especifica esta obligación de los ayuntamientos.

La partida es de 300.000 euros en total para gastos que se acrediten entre enero y noviembre de 2017, de los que la alimentación, identificación y esterilización de perros y gatos se llevará 200.000 euros. Para campañas de sensibilización contra el abandono de mascotas serán 30.000 euros y para la compra de material 70.000 como máximo. A estas ayudas pueden optar tanto los ayuntamientos como las asociaciones sin ánimo de lucro que realicen estas tareas.

Desde la Fegamp entienden que esta convocatoria "deja claro" que era necesaria una inyección económica a los concellos, pero es todavía insuficiente. A su parecer, este tipo de responsabilidades deberían incluirse en los mecanismos habituales de financiación de la Xunta a los concellos, ya que una convocatoria de ayudas "no garantiza" que todos tengan soporte económico. Tal y como está ahora, dicen, unos recibirán dinero y otros no. El vicepresidente de la Fegamp y alcalde de Cervo, Alfonso Villares, explica en la última publicación de la federación que los concellos tienen "muchas dificultades" a los hora de poner en marcha las obligaciones legales que recaen en ellos puesto que casi siempre van acompañadas de un coste del que no disponen.

La Lei de protección e benestar dos animais de Galicia será aprobada por el Parlamento la próxima semana, tras recoger algunas de las modificaciones de los grupos parlamentarios. La norma recoge que solo los concellos son responsables de la recogida de animales vagabundos o extraviados por lo que un ciudadano solo podrá hacerlo si se trata de una situación de emergencia. Incumplirlo será considerado como una infracción grave que puede ser multada con entre 501 y 5.000 euros de sanción. Además, solo podrá hacerlo si es para poner al animal a disposición de un centro de recogida autorizado o de una autoridad competente. Los ayuntamientos podrán prestar este servicio de manera directa o bien a través de una asociación de protección y defensa de los animales por medio de convenios de colaboración. Los detalles de cómo deberá llevarse a cabo la recogida de gatos y perros está pendiente de ser desarrollada en un nuevo reglamento.

La norma prohíbe la venta ambulante de animales domésticos, sanciona su maltrato y limita la presencia de animales en los circos, entre otras medidas. Sin embargo, excluye de la protección a los toros de lidia y a todos los equinos.