La línea Gijón-Chamartín es la que cuenta con el Alvia a Madrid más rápido en comparación con las comunidades de la cornisa cantábrica, a la que todavía no ha llegado el con 120 kilómetros por hora, según los datos de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles. El pódium lo completan, dos trazados gallegos: en segundo lugar los 117 km/h en el corredor de Santiago de Compostela a Madrid, solo uno más que los 116 km/h que en A Coruña, que se coloca en el tercer puesto. Fuera del podio se sitúa Santander, con una media de 114 km/h y Vigo con una velocidad media de 105 km/h. Luego se sitúa San Sebastián con 103 km/h. Y en los últimos puestos Lugo con 99 km/h y Bilbao con 97 km/h.

En todo caso, el escaso avance de las líneas específicas de alta velocidad, las dificultades orográficas y las carencias del tendido hacen que el promedio de velocidad en los Alvia de la cornisa sea considerablemente menor que en los del resto de España. Los trenes de Pamplona llegan a 145 km/h y los de Logroño a 133 km/h. En el sur, los convoyes que conectan Cádiz con Madrid se sitúan en 151 km/h y los de Huelva en 157 kilómetros.

El peor tiempo de viaje actual es el de la línea A Coruña-Madrid con cinco horas y 37 minutos, mientras que tanto desde Santiago como desde Bilbao se tarda a Chamartín cinco horas y ocho minutos en cada caso. Por debajo de las cuatro horas destaca el recorrido entre Gijón y Madrid con cuatro horas y 38 minutos, mientras que viajar desde Santander a la capital de España ocupa cuatro horas y 16 minutos. Y el mejor promedio lo obtiene la ruta que sale desde Oviedo con una media de cuatro horas y 11 minutos.