Aumentan a 19 los puntos gallegos con situación dos, de riesgo real para núcleos poblados, por los incendios forestales, tras decretarse esta situación en los fuegos en Boborás y A Gudiña, en la provincia de Ourense.

La única desactivación de situación dos durante esta mañana ha sido en Boiro, según informa la consellería de Medio Rural.

De este modo, la provincia de Lugo mantiene en alerta por riesgo para la población los fuegos de Noceda y Donís, en Cervantes, y los de Anxeriz, en el Ayuntamiento de Friol; el de Chavaga, en Monforte y el de Cangas, en el Ayuntamiento de Pantón.

En la provincia de Pontevedra continúan bajo situación dos los seis incendios que amanecían con esta circunstancia, el de Ponteareas, que empezó en Padróns, como más importante tras extenderse a los municipios de Redondela, Soutomaior y Pazos de Borbén, donde está el riesgo en Nespereira, con 1.500 hectáreas de superficie ardida.

Los fuegos de Salvaterra de Miño, en Pesqueiras, cercano a Castelo; Gondomar, en Morgadáns, próximo a este mismo núcleo; As Neves, parroquia homónima, junto a Paredes; y Baiona, en Baíñas, cercano a esta población, también están en situación de riesgo real para la población.

La provincia que más incendios con situación de peligro presenta es Ourense, con ocho incendios de estas características.

Uno de ellos en San Cristovo de Cea, en Oseira, por proximidad a Pieles; otro en Baños de Molgas, en Betán, por cercanía a Nevoeiro; un tercero en Chandrexa de Queixa, en Chaveán, por proximidad a Vilamaior, en el municipio vecino de Castro Caldelas, otro en Paderne de Allariz, en la parroquia de Cantoña, el de Lobios, en Araúxo, además de los recientemente decretados en esta situación e A Gudiña y Boborás.