Ante la falta de entendimiento con la Dirección General de Tráfico (DGT), la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) ha decidido prorrogar la huelga que iniciaron a finales de junio hasta finales de año para que se les abone los 250 euros mensuales de aumento de sueldo que, en su opinión, le había prometido el organismo que depende del Ministerio de Interior en 2015. Cada semana de lunes a miércoles los examinadores convocan paros que de media siguen el 70% de los empleados y que cada día dejan sin examinarse a 300 alumnos en Galicia. Esta situación ha sumido a las autoescuelas gallegas en una profunda crisis con una caída de las matriculaciones de hasta el 80%. De alargarse la huelga hasta fin de año el número de afectados rozaría los 20.000, a pesar de que los jueves y viernes la DGT intenta recolocar a algunos de ellos. De hecho, desde la Federación Galega de Autoescuelas denuncian que muchos han aplazado su meta de sacarse el carné hasta Navidades cuando vuelvan de vacaciones a sus casas desde las ciudades en las que estudian o trabajan durante el año.

Por ahora, el conflicto continúa en punto muerto porque la DGT respondió a la propuesta de resolución de la protesta que Asextra le envió que no tiene competencias en materia de retribuciones, ya que solo gestiona una partida presupuestaria de productividad que antes tiene que aprobar la Secretaría de Estado de Presupuestos y Gastos. Tráfico recordó además al colectivo de examinadores que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ya aclaró que el Gobierno central tiene como prioridad incrementar el número de empleados públicos en lugar de subir el salario a algunos trabajadores. En este sentido, Tráfico recuerda en su respuesta la autorización para convocar 70 plazas de acceso libre para esta especialidad, junto con otras 435 de promoción interna y un centenar que se cubrirán con personal militar. El ministro también había descartado en su día el aumento de sueldo porque tendría que hacerse efectivo a todo el funcionariado.

Aunque en lo que se refiere la mejora salarial la DGT es tajante, el organismo sí se muestra dispuesto a llegar a acuerdo en otras propuestas como la reducción de pruebas a un máximo de 12 en base, explican los examinadores, a un acuerdo firmado también en 2015. El ente público recuerda además que ha incluido a representantes de Asextra en grupos de trabajo para atender a su petición de mejorar la calidad de sistemas de exámenes.