La Consellería de Medio Rural cifró ayer en 48,65 las hectáreas quemadas en el incendio extinguido el miércoles en el municipio ourensano de Viana do Bolo. Cinco agentes, quince brigadas, siete motobombas, dos palas, ocho helicópteros y un avión participaron en la extinción.

El riesgo de incendios se mantiene debido a las previsiones de tiempo cálido y seco para los próximos días. De hecho, el Ejecutivo gallego prorrogó al 12 de noviembre el dispositivo contra incendios, manteniendo operativos a mayores a 500 empleados de Seaga y a 436 brigadistas temporales del propio sistema autonómico.