Feijóo evitó ayer responder a las nuevas acusaciones de descoordinación por parte de efectivos que participaron en la lucha contra los fuegos de mediados de mes. A las quejas de trabajadores del 112, miembros de los bomberos públicos y comarcales, integrantes de las brigadas y agentes forestales de la semana pasada, se unieron bomberos del Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Val Miñor, que en una carta criticaron la falta de un mando único y el colapso del 112 y el 085 el día 15, en que la virulencia de las llamas fue mayor.

El presidente gallego adelantó que ofrecerá todos los datos sobre las comunicaciones de esas jornadas en una comparecencia específica en el Parlamento autonómico el día 7 de noviembre, después de la que realizó la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, el pasado martes 17. Aún así, criticó de nuevo el rechazo de varios concellos de Val Miño -"sabemos cuáles", dijo- a las brigadas cofinanciadas por la Xunta. Hace días citó a Nigrán (PSdeG) y Baiona (PP).

Además, rechazó las acusaciones de la oposición sobre la congelación de fondos para prevención y extinción de incendios en las cuentas de 2018. "Se incrementa el presupuesto en 10 millones hasta un total de 180", aseguró.