Exceso de velocidad, consumo de alcohol y/o drogas y no uso del cinturón de seguridad. Son las infracciones más frecuentes detectadas por las patrullas de la Guardia Civil durante la campaña de control de la semana pasada en las carreteras convencionales. Los resultados del dispositivo especial de vigilancia sitúan a Galicia en rojo en los mapas de la DGT: casi una de cada cinco infracciones destapadas en toda la red convencional del país fueron cometidas en la comunidad gallega. En concreto, 4.003 denuncias -según datos ya avanzados esta semana por este periódico- de las casi 22.000 interpuestas en el conjunto del país entre los días 23 y 29 de octubre.

Los resultados en el conjunto del territorio son un reflejo del balance registrado en la comunidad, con más de la mitad de los expedientes sancionadores abiertos por exceso de velocidad. En total, las denuncias por pisar más de la cuenta el acelerador en las carreteras convencionales, que en Galicia concentran más del 90% de los accidentes de tráfico mortales, rondan las 12.200. La segunda conducta antirreglamentaria que suma más denuncias en vías secundarias es el no uso del cinturón de seguridad o las sillas de retención infantil -casi 1.400- . Y por presentar una tasa de alcohol superior a la permitida, un total de 897, según el balance hecho público ayer por la DGT.

Doble de positivos en drogas

Tráfico destaca además que entre las denuncia figuran más de 600 conductores que dieron positivo en drogas, lo que supone un aumento respecto a la última campaña, realizada en mayo, cuando se detectó a un total de 328 automovilistas que habían consumido estas sustancias.

"Estas cifras no vienen más que confirmar la preocupación de la DGT por el aumento de conductores que se ponen al volante tras haber consumido cannabis, cocaína u otras sustancias que afectan a la conducción. Por este motivo se está incrementado el número de pruebas de drogas", destaca el director de Tráfico, Gregorio Serrano.