"Internet llegó para cambiar y revolucionar el mundo del turismo". Así describe el presidente del Clúster Turismo de Galicia, Francisco González, la importancia de la Red para sus negocios durante los últimos años con la revolución digital. Un signo evidente del peso de internet es el hecho de que entre el 40% y el 50% de las reservas en la comunidad se gestionan a través de plataformas online, según estimaciones del sector. González aclara que esta situación se da en hoteles grandes o de tamaño medio, ya que en los establecimientos más pequeños no se suele apostar en esa medida por las reservas a través de páginas web. Las plataformas cobran a los alojamientos que se anuncian en sus páginas comisiones que oscilan entre el 17% y el 21% del precio por habitación. Es el peaje que tienen que pagar los establecimientos hoteleros por tener visibilidad en internet

El año pasado el turismo gallegoy de ellas, más del 40% -unos 3,2 millones- se gestionaron vía telemática. Los datos anuales del Instituto Nacional de Estadística (INE) también revelan que la tarifa media por habitación en 2016 en la comunidad fue de 56,8 euros. En base a estas cifras se estima que por cada reserva las plataformas ingresan unos nueve euros y, por tanto, su facturación por las más de tres millones de reservas online superó los 30 millones de euros.

Son cifras a la baja porque, como apunta González, son bastantes los establecimientos que están dispuestos a pagar a estos portales comisiones más altas que la media -incluso hasta el 40%- para llegar a más público y mejorar su posición en la página. El representante de los hoteleros gallegos destaca que la capacidad de venta online permite llegar a turistas de todo el mundo que con solo un clic pueden reservar un hotel a cientos o miles de kilómetros. Y no solo desde el ordenador, sino también desde el teléfono móvil. En Galicia, las reservas telemáticas ya suponen la mitad.

Una de las ventajas que según el sector ofrece a los alojamientos estar en internet es la posibilidad de modificar su política de precios. "Permite formar parte de un mercado más activo adaptado en la ocupación y la temporada", destaca Francisco González. En este sentido, comparado con el sistema anterior de folletos a precio fijo a través de los touroperadores las tarifas pueden variar según la demanda. Y no es una tendencia que solo siguen los hoteles sino que ya está empezando también a extenderse a los restaurantes con ofertas diferentes dependiendo de las reservas. Otra de las opciones pasa por lanzar paquetes especiales en fechas puntuales y descuentos u otro tipo de detalles por el simple hecho de contratar el servicio por internet con el objetivo de captar a los clientes más digitales.

Internet se ha convertido en el gran motor de las ventas del sector. La Axencia de Turismo de Galicia, consciente de la importancia de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para dar a conocer Galicia, presentó cuenta con aplicaciones para que los usuarios puedan moverse por Galicia y hacer turismo desde el móvil. Según González, las ferias ya no son lo que eran antes y no se acude a ellas para promocionar los destinos de la comunidad sino que funcionan como punto de encuentro entre touroperadores. Para llegar al cliente se recurre a las nuevas tecnologías porque no son el futuro, sino que son ya un "presente" que hay que tener muy en cuenta.

La Estratexia do turismo de Galicia 2020, elaborada por empresarios y Xunta también incluye la modernización como una de las asignaturas pendientes del turismo gallego para ganar en competitividad y rentabilidad. El texto del Gobierno gallego recoge que el déficit en el aprovechamiento de las nuevas tecnologías lastra el crecimiento turístico. Aunque los hoteles priman su presencia en las plataformas de reservas hoteleras, la Xunta apunta que también es importante que su propia página web esté modernizada para gestionar las reservas que les puedan llegar por esa vía y desde la que informar de la oferta turística de la comunidad. La Axencia de Turismo de Galicia considera que también falta formación en este ámbito por lo que trabaja en acciones formativas para usar las nuevas tecnologías de forma eficiente como, por ejemplo, aprovechar todas las posibilidades que ofrecen las redes sociales que a través de concursos, audioguías o aplicaciones permiten captar nuevos clientes.