Los presupuestos gallegos para 2018 han superado un paso fundamental para que sigan avanzando, después de ser aprobados por la Xunta y presentados por cada departamento en el Parlamento autonómico. Y es que el PPdeG ha rechazado este lunes las enmiendas de devolución de En Marea, PSdeG y BNG, de forma que los presupuestos serán tramitados en la Cámara, con la previsión de que su aprobación definitiva se produzca el 19 de diciembre.

En un pleno específico, En Marea, PSdeG y BNG han defendido sus enmiendas de totalidad, con el objetivo de que se reelaborasen unas cuentas que ven "poco ambiciosas" e "injustas", convencidos sus respectivos portavoces, Luís Villares, Xoaquín Fernández Leiceaga y Ana Pontón, de que "consolidan recortes" y también políticas que se han demostrado "ineficaces". Todos ellos han coincidido al manifestar otras preocupaciones, por ejemplo, sobre la ejecución o la deuda.

La mayoría absoluta de los populares ha rechazado en bloque todas sus enmiendas. Lo avanzó ya en su primera intervención, el portavoz parlamentario de los populares, Pedro Puy, quien ha defendido el proyecto de la Xunta --con una cuantía que asciende a casi 9.500 millones de euros, un 2,9% más con respecto a las cuentas en vigor, y un crecimiento económico previsto del 2,5%-- y ha agregado que al PPdeG no le "acaban de gustar las propuestas de la oposición".

Puy ha reivindicado una gestión económica que incide "en la estabilidad" y ha incidido en que la "ambición" se mide "en función de lo que se ambicione". Así, ha esgrimido, por ejemplo, que los populares "ambicionan" unos presupuestos que "sean sostenibles a lo largo del tiempo, que la deuda no aumente más de lo necesario o que la inversión se haga con ahorros brutos".

Esto será posible gracias a unas cuentas, ha asegurado el portavoz popular, que crecen y en las que servicios públicos como la sanidad o la educación son "prioritarias". Puy ha restado finalmente valor a las críticas de los portavoces de la oposición, a los que ha tildado de "nostálgicos de la burbuja inmobiliaria" y ha concluido que la suya "no es la forma adecuada de ver los presupuestos".

"Mucho hecho y mucho por hacer"

En la misma línea de Puy se había pronunciado previamente el conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, quien ha aprovechado para avanzar que la oferta de empleo público de la Xunta para 2018 llegará a las 3.400 plazas. Martínez ha reconocido que "queda mucho por hacer", pero también ha esgrimido lo "mucho" que ha hecho el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo, con "realismo" y "rigor".

Martínez ha subrayado que "los votos" sitúan a cada uno donde corresponde y ha puesto en duda que la oposición analice adecuadamente los presupuestos y que cuestione que sean "expansivos". "No sé si es por maldad o por tomarnos a chufla, yo creo que es por impericia", ha afeado, muy crítico también con el uso de la oposición del "monotema de la deuda". Tanto él como el portavoz popular han defendido también la política fiscal, muy criticada por la oposición.

"Estrategia neoliberal"

Enfrente, el portavoz de En Marea, Luís Villares, ha incidido en que a Feijóo se le "quemó" su fachada de "buen gestor" con los incendios y ha cargado contra unos presupuestos que "consolidan los recortes, las desigualdades y la precariedad laboral" en la "estrategia neoliberal de reducir el peso de lo público en la economía".

Durante su intervención, ha incidido en que la evolución del empleo es "decepcionante". También ha afeado la precariedad laboral y ha advertido de que esta situación no la soluciona "un presupuesto restrictivo y menguante".

Asimismo, ha acusado a los populares de intentar "destruir el Estado de Bienestar" y ha prevenido de que las nuevas cuentas suponen "otro escalón en la contrarreforma fiscal". "Su previsión es ingresar por los impuestos lineales, los que son iguales para todos", ha remarcado, antes de esgrimir que En Marea quiere unos presupuestos "que generen confianza y expectativas". "Queremos que la riqueza que se manifiesta en el PIB se traslade a las personas", ha sentenciado.

Xunta "del efecto placebo"

Por su parte, el portavoz parlamentario del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, ha advertido de que "la pobreza, la desigualdad y el estrés económico" son problemas que aquejan a la sociedad gallega, y ha constatado que las cuentas diseñadas para el ejercicio próximo no les dan respuesta. Y es su juicio, el proyecto se basa "en un crecimiento socialmente desequilibrado", que renuncia "a una política de ingresos equitativa y eficiente", y que está "lastrado por la inercia".

Así, ha comparado a la Xunta con un médico que diagnostica con precisión las enfermedades de su paciente, pero que después lo envía a casa con la misma prescripción "de siempre". "Es la Xunta del efecto placebo. Confiando en que repitiendo a todas horas que estamos mejor, olvidemos las dificultades", ha equiparado.

También ha incidido en la "dependencia" de la economía gallega de los mercados externos. "Y si todo depende de los otros, ¿de qué sirve el autogobierno en materia económica? Nuestra idea es que sí que sirve, pero son las opciones conservadoras escogidas por el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo las que explican esa incapacidad", ha zanjado.

"Sumisión" del "rebelde Feijóo"

A su vez, la portavoz del BNG, Ana Pontón, ha advertido que los presupuestos de 2018 representan "políticas viejas y fracasadas" que solo han servido para que "la crisis fuera más profunda" y que han provocado "desigualdad" y "sufrimiento" a los gallegos. Unas cuentas diseñadas con una visión "neoliberal, depredadora y neocolonial". Todo ello marcado "por una brutal recentralización".

"Ustedes son alumnos aplicados del centralismo de Rajoy y de los recortes de Montoro", ha sentenciado, antes de defender que presentan la enmienda de devolución "por responsabilidad" y con el objetivo de que los populares "rectifiquen" y "cambien los recortes y deterioro" por "una política a favor de las mayorías sociales".

La dirigente nacionalista ha advertido que la "sumisión" de Feijóo tiene "un precio altísimo para este país" y ha ejemplificado con la "exclusión" de Galicia del Corredor Atlántico. "¿Y qué hace el rebelde Feijóo? El rebelde Feijóo aplaude y dice que esto se va a solucionar en 2023. La misma sumisión que vimos con los retrasos del AVE, la AP-9 o los incumplimientos de la financiación. Pagamos a precio de lujo la sumisión de Feijóo", ha afeado.

Finalmente, Pontón se ha referido al "malestar democrático" que provoca ver "como se persiguen ideas, hay represión política y se recortan libertades fundamentales". "No aceptan que somos una nación y que no nos pueden imponer su modelo de Estado y su caduca monarquía", ha aseverado, al tiempo que ha rechazado que representantes de un partido "corrupto" como el PP se reivindiquen en la Cámara como "campeones del cumplimiento de la ley".