Desde 2008 y hasta 2015, Galicia siempre estuvo entre las comunidades que más adjudicaciones de obra pública recibió del Ministerio de Fomento. La causa es que se llevaba una gran parte de las inversiones del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que es el encargado de licitar las obras del tren de alta velocidad.

Pero en los últimos dos años, las inversiones para esta gran infraestructura ya no son tan cuantiosas porque los grandes trabajos ya se han adjudicado o realizado y ahora solo quedan obras menores. Las previsiones que maneja el Gobierno es que el AVE llegue a Galicia en 2018.

Pero pese a que el tren de alta de velocidad no aporta ya grandes adjudicaciones por parte de Fomento (en los nueve primeros meses solo sumaron 1,5 millones), la comunidad gallega no solo sigue entre las que más contrataciones recibe del ministerio, sino que en los primeros nueve meses del año fue la que más importe consiguió. En total acumuló hasta septiembre 173 millones. El triple que en el mismo periodo del año anterior.

Estos 173 millones suponen un 18,7% de los 926 que Fomento adjudicó a nivel nacional entre enero y septiembre. Solo Cataluña, con 128, se acerca a la cifra de Galicia. El resto se queda por debajo de los 100 millones. La tercera es Baleares con 92,2; Canarias con 83 y Madrid con 73, según los datos del Ministerio de Fomento.

Dos grandes obras son las culpables de la elevada cifra gallega. La primera es el acceso ferroviario al Puerto Exterior de Ferrol y la segunda el tramo de la autovía Melide-Palas de Rei. Ambas suman el 89% de los 173 millones contratados en los nueve primeros meses en Galicia.

Puerto de Ferrol

En febrero, el Ministerio de Fomento adjudicó por 72,5 millones el acceso por tren al puerto ferrolano. Previamente, las obras fueron licitadas en abril de 2016 por un importe de 111,9 millones y un plazo de ejecución de 46 meses. Los trabajos comenzaron a finales del pasado mes de septiembre. Esta actuación es la de mayor envergadura que jamás ha realizado una Autoridad Portuaria, tanto desde el punto de vista de su importe como de su complejidad técnica.

El proyecto consiste en la construcción de un ramal ferroviario de aproximadamente 6,4 km que conectará el puerto exterior con el puerto interior.

El trazado discurrirá la mayor parte en un túnel (atravesará el macizo de Brión, 5,6 km) y un viaducto, que cruzará la ensenada de A Malata (0,6 km).

La segunda gran obra por envergadura y coste es el trayecto Melide-Palas de Rei de la autovía A-54 entre Lugo y Santiago. Fue adjudicada en mayo por un importe de 70,8 millones. En el tramo, de 11,7 kilómetros, se construirán 16 estructuras, de las que cinco serán nuevos viaductos.

Esta nueva autovía A-54 supone un eje importante para la vertebración del interior de Galicia ya que permitirá unir Lugo con Santiago mediante una vía de gran capacidad. El tramo discurrirá al sur de la carretera N-547, en un trazado casi paralelo a ella.

Pese a que los 173 millones colocan a Galicia como la comunidad con la mayor adjudicación de obras entre enero y septiembre, la cifra está muy lejos, por ejemplo, de los 661 millones de 2008; de los 898 de 2010, y sobre todo, de los 1.093 de 2012, la mayor cuantía que el Ministerio de Fomento contrató en su historia en la comunidad gallega. Si entre enero y septiembre, las adjudicaciones en Galicia se incrementaron un 247%, a nivel nacional cayeron un 16%. Las contrataciones de AENA, el gestor de los aeropuertos, ascendieron en toda España a 275,3 millones, un 12% más que en el mismo periodo de 2016.

ADIF, el gestor de las infraestructuras ferroviarias, adjudicó obras por un importe cercano a 68 millones, lo que supuso un retroceso de un 80%.

Por último, las adjudicaciones de Puertos del Estado se incrementaron un 40,5 %, hasta los 315,8 millones. De ellos, 72,5 se los llevó el acceso ferroviario al Puerto Exterior de Ferrol.