Los últimos análisis del agua en los municipios pontevedreses de Vigo, Moaña, Redondela y Soutomaior evidencian parámetros altos, pero que no superan los límites aconsejados, así que por el momento no se adoptarán restricciones de su uso tanto para beber como para cocinar, aunque la Xunta seguirá con sus propios muestreos para garantizar que los niveles no se disparan. La jefa territorial de la Consellería de Sanidade, Ángeles Feijóo, señaló ayer que se trata de agua potable, pero advirtió de que es "agua de muy baja calidad", porque todos los parámetros en estos municipios se sitúan por debajo de los límites legales, pero son elevados.

La Xunta había notificado el jueves por carta a estos ayuntamientos del área de Vigo que presentaban valores "por encima de los límites establecidos en la normativa vigente del agua de consumo humano" y había puntualizado que esos "valores anormales" no suponían un riesgo sanitario por el momento, aunque "de mantenerse en el tiempo, obligarían a tomar medidas", como decretar que el agua no era apta para la ingestión.

Tras las mediciones de la Consellería de Sanidade, fueron los gestores de los servicios municipales de agua los que trasladaron sus propios datos para confirmar si se ratificaban los parámetros anormales. Como no ha sido así, por el momento no se restringe el consumo humano de agua en ninguno de los municipios en los que habían saltado las alarmas.

De todas formas, la jefa del servicio de control de riesgos ambientales de la Consellería de Sanidade, Natalia Botana, alertó de que se registran "valores muy elevados", por lo que es preciso "extremar" la vigilancia. Por ello, los inspectores de Salud Pública están recogiendo durante el fin de semana sus muestras en los abastecimientos más preocupantes "para hacer un seguimiento intensivo y poder reaccionar si los valores se superan".

Además de la situación de partida, las lluvias previstas para las próximas horas podrían provocar que se rebasen los valores legalmente fijados de turbidez, hierro y color del agua. Por ello, aparte de Vigo, Moaña, Redondela y Soutomaior, también se toman muestras en el Consorcio de Louro, que abastece a O Porriño y Salceda y en el abastecimiento de Cangas.

En cuanto a Vigo, los últimos datos de los cuales dispone la Xunta son los remitidos en la tarde del viernes por Aqualia, concesionaria del servicio, que revelaron 514 microgramos por litro de hierro, un parámetro que se elevó a 559 microgramos por litro en el punto de la red en Canido donde se habían disparado los valores. No obstante, el Ayuntamiento de Vigo aseguró que los parámetros han mejorado "desde ayer" y ha vuelto a proclamar que "toda el agua de la ciudad es potable al 100%".

El consistorio gobernado por el socialista Abel Caballero carga contra el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a quien hace "responsable de lo que está sucediendo" y a quien acusa de practicar una "política partidaria de la más baja estofa con este tema, en función de sus intereses personales".