El presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices, pidió ayer al Apóstol Santiago por la "convivencia armónica" del "conjunto de pueblos de España", de modo que sean capaces de superar sus "diversas sensibilidades" y sepan "tener puentes" para "redescubrir lo que nos une".

Durante su intervención como delegado regio en el acto de Traslación de los restos del Apóstol que se celebró ayer en la Catedral también rogó por la protección de la "casa común" de todos los ciudadanos frente a "desafíos" como la contaminación, el cambio climático, la sobreexplotación de recursos o los incendios que tiñeron de negro extensos territorios de Galicia. Reivindicó la identidad gallega, que permite -incidió- "la integración en una España plural y diversa, con una democracia consolidada" que lleva a las cotas de progreso más altas jamás alcanzadas y, a su vez, la inserción en una UE referente mundial en cuanto a prosperidad y derechos humanos, sin olvidarse del vínculo existente con Latinoamérica.

"Galicia es un mundo entero, integrado en la globalidad universal", manifestó, al tiempo que también pidió al Apóstol que aliente "la solidaridad y la capacidad de entendimiento" de personas, empresas y familias "para construir una sociedad más armónica, abierta a todas las sensibilidades", además de que oriente el proceder de los responsables públicos de modo que "la búsqueda del bienestar de la ciudadanía" sea su guía de actuación.

Por su parte, el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, instó a afrontar "el desacorde conjunto de monólogos" que existen en la actualidad a través de "un diálogo sincero" para, de esta forma, "superar la actual crisis de civilización".