A lo largo del mes que viene, la Xunta aprobará y presentará el borrador de la nueva Lei de Ordenación do Territorio, que aspira a ser un instrumento que regule los desarrollos urbanísticos e industriales, pues establecerá el marco normativo para los planes y proyectos sectoriales de incidencia supramunicipal, los planes territoriales integrados y de ordenación del medio físico. La conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, anunció ayer en el Parlamento que esta decisión pretende "actualizar" una legislación con "20 años de vigencia".

Mato compareció en la Cámara para explicar las líneas de actuación de su departamento y vinculó el nuevo texto legal con las medidas del Ejecutivo aplicadas para impulsar un urbanismo "ordenado, respetuoso y sostenible". Relacionó con esas metas la aprobación entre este año y el siguiente de dos instrumentos recogidos en la Lei do Solo de 2016, que recibió luz verde tras dos años de tramitación y supuso la enésima modificación de la norma. Se trata del Plan Básico Autonómico y de los Planes Básicos Municipales, que serán modelos de desarrollo que los municipios podrán usar para sortear su escasez de medios técnicos para elaborar sus propios planeamientos.

El departamento de Mato aseguró que el primer instrumento beneficiará a todos los concellos, "especialmente a los casi 50 municipios que aún se rigen por normas provinciales de 1991 y para los 170 que lo hacen por normas subsidiarias municipales o por planes que no están adaptados a la Lei do Solo". El segundo estará destinado a los ayuntamientos con menos de 5.000 habitantes sin plan general. Los primeros modelos serán aprobados "a finales del año 2019". La conselleira también adelantó que su departamento desarrollará mediante reglamento la ley de protección del paisaje, aprobada hace una década.

La oposición atacó los planes de la Xunta por considerarlos carentes de un modelo sustentable para la comunidad, al tiempo que le afeó a Mato su posible candidatura a la alcaldía de A Coruña al frente del PP en las municipales de 2019.

El diputado de En Marea Marcos Cal censuró el "cambio de reglas de juego cada 15 días en función de los intereses que quieran defender" por parte de la Xunta y vinculó sus anuncios a su "campaña municipal" en A Coruña. La socialista María Pierres criticó el "abandono y desarrollo arrítmico" de Galicia provocado por la Xunta, a la que acusó de alentar el "feísmo" por "sancionar las consecuencias" de este y no atajar sus causas. Por su parte, el nacionalista Luís Bará le recordó a Mato la "improvisación" de la Xunta modificando la Lei do Solo para "saltarse sentencias judiciales", en alusión a Vigo y los cambios para permitir la ampliación de la planta de PSA, lo que destacó como muestra de su carencia a la hora de "planificar y ordenar el territorio".