El 5 de mayo de 1945 fue liberado el último campo nazi, el de Mauthausen. De los casi 10.000 españoles deportados durante la Segunda Guerra Mundial a campos de concentración, un total de 179 gallegos -78 de la provincia de A Coruña, 42 de Lugo, 30 de Ourense y 33 de Pontevedra-, el 60% no sobrevivieron a los horrores del exterminio.

Solo 73 gallegos superaron los trabajos forzados en las canteras, la hambruna -apenas tenían una morcilla de un kilo para 20 y un pan para seis-, el frío, los experimentos médicos, las cámaras de gas y los hornos crematorios. Con motivo del Día Internacional de la Víctimas del Holocausto, pasado mañana, el Parlamento gallego aprobó ayer una declaración institucional en memoria de los prisioneros deportados a campos de concentración, una resolución que hizo extensiva a las víctimas de "cualquier barbarie de este tipo".

La declaración institucional se completará la próxima semana con un acto conjunto con la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), grupo originario del Bierzo leonés promotor de las primeras exhumaciones del franquismo y que promovió durante los últimos días varias iniciativas en recuerdo de los españoles deportados a los campos nazis. La previsión es que acudan al encuentro familiares de víctimas del holocausto. Solo de la ciudad de A Coruña estuvieron presos en Mauthausen y Gusen 21 hombres.

En la resolución, la Cámara gallega señala que el Holocausto "será siempre una advertencia para todo el mundo de los peligros del odio, el fanatismo, el racismo y los prejuicios". Y por ello llama a la Xunta "a trabajar con ahínco" contra "los posibles brotes de racismo, xenofobia y discriminación" al tiempo que pide a instituciones y ciudadanos que "permanezcan vigilantes" para que "nunca más un régimen como el que produjo el Holocausto pueda asentar" en ningún lugar del mundo.

La declaración, leída en el pleno celebrado ayer por el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, recuerda que el 1 de noviembre de 2005, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió designar el 27 de enero como Día Internacional de conmemoración anual en memoria de las víctimas del Holocausto, "todas ellas víctimas del nazismo, entre las que se encuentran también gallegos".

"El Holocausto es el resultado de un programa de persecución, encarcelamiento y exterminio llevado a cabo por el nazismo, que asesinó a más de seis millones de personas", indica la declaración institucional, que apunta su origen en "el intento de eliminación de la disidencia política e ideológica", algo que "derivó en un genocidio que contó con la colaboración de la Dictadura franquista y que persiguió a miles de hombres y mujeres que huyeron del Estado español después de la derrota de la República en 1939".

Por ello, el Parlamento rendirá homenaje a los republicanos españoles que "terminaron deportados en los campos nazis por la colaboración del dictador Francisco Franco con el nazismo alemán y el fascismo italiano".