Las infracciones penales en carretera copan la mayoría de los juicios que se celebran cada día en los juzgados gallegos: hasta un 35% de los procesos llevados a juicio en la comunidad son ponerse al volante con una copa de más, circular sin carné, pisar más de la cuenta el acelerador o negarse a someterse a una prueba de alcohol o a un narcotest. Y de entre todos los ilícitos penales (homicidios, asesinatos, robos, agresiones sexuales, lesiones, tráfico de drogas...) los delitos viarios representan el 7%. De todas las sentencias dictados por los jueces en Galicia, el 41% son por infracciones al volante.

El fiscal de Seguridad Vial prestó especial atención a los casos de multirreincidentes, que aunque es un número "no demasiado elevado" sí suponen "un peligro latente para todos los usuarios de las vías". Por ello, la Fiscalía puso en marcha el año pasado una unidad que se encarga de elaborar un estudio criminológico sobre "la previsión y riesgos de la posible reincidencia del investigado" para "proponer las medidas más adecuadas a cada caso concreto". Carlos Gil advirtió además sobre la necesidad de poner fin a la sensación de "impunidad" con la que actúan algunos delincuentes viarios. "No importa tanto la gravedad o importancia de las penas (...) como el hecho de que se tenga la completa seguridad de que si se cometen delitos al volante, se van a perseguir y sancionar, sin dejar espacio a la impunidad", sentenció.