El aire frío se ha instalado en Galicia y después del avance de este fin de semana en los próximos días la meteorología estará de nuevo marcada por los chubascos -en especial en la mitad norte de la comunidad- las temperaturas invernales y sobre todo la cota de nieve que se situará en niveles bajos, tanto que el miércoles podría caer hasta los 100 metros. En la jornada de ayer se mantuvo entre los 500 y los 600 metros y causó problemas de circulación e incidencias en 15 carreteras de la comunidad.

La provincia lucense fue la más afectada con hasta nueve vías con dificultades para transitar. La Dirección General de Tráfico alertó de circulación condicionada por nevadas en la autovía del Cantábrico (A-8), en parte de la LU-540 que va de Viveiro a Xermade, en la N-640 en el tramo entre Alto do Hospital (Portomarín) y Antas de Ulla, en la N-540 desde Lugo hasta A Barrela (Carballedo), en la N-547 de Guntín y Palas de Rei o en la carretera DC-2.1 a la altura de Chantada. El mal tiempo también provocó varias incidencias en la provincia como una salida de vía con un herido leve en Balouta, tres coches atrapados en A Fonsagrada, donde también se registró un accidente, caída de árboles en Castroverde y problemas para circular en el camino de O Piornedo.

Tráfico también avisó de incidencias por niebla y nieve en el tramo de la A-52 que va de Achas y Cocho, en el concello de A Cañiza, en la AG-53 a la altura de Dozón y Outeiro, y enLalín hubo problemas en la AP-53 y en parte de la PO-533. La circulación de camiones y vehículos articulados quedó prohibida en un tramo de la PO-534 que une Silleda y Forcarei. En el caso de Ourense la A-52, en A Mezquita fue la vía más perjudicada por la acumulación de nieve.

La semana empezará con más nevadas y viento. Por eso, MeteoGalicia ha activado para hoy la alerta amarilla en las zonas montañosas de Lugo por acumulación de más de cinco centímetros de nieve y por ráfagas de viento más de 80 kiloméros por hora. También puede llegar a esa intensidad en la montaña de Ourense y en el interior de Pontevedra, donde también se ha decretado el aviso de nivel amarillo. En el mar el viento soplará del nordeste con fuerza siete.

Las temperaturas se mantendrán o experimentarán un ligero descenso, y entre las siete principales ciudades gallegas solo Ferrol y Vigo alcanzarán los 10 grados de máxima. Las mínimas oscilarán entre los cinco grados de la urbe ferrolana y uno en Lugo y Ourense. La masa de aire frío situada sobre la península mantendrá bajas las temperaturas durante al menos tres días más.

La cota de nieve se situará hoy en la comunidad gallega en torno a los 400 y 800 metros, descendiendo al final del día y mañana hasta los 200 y 400 metros y el miércoles de 100 a 200. Pero no se prevén precipitaciones en la provincia de Ourense ni en la de Pontevedra, que registrarán nubes y claros. Solo se espera lluvia y nieve en el norte y en el interior de las provincias de A Coruña y Lugo.