Los despachos de abogados también están notando los efectos de la huelga indefinida por parte de los funcionarios de la Administración de la Justicia que dependen de la Xunta porque cada juicio que no se celebra es un caso que no cobran y este paro hará que vean mermados sus ingresos de este mes. Por eso, desde el Consello da Avogacía de Galicia apelan al diálogo y su presidente Félix Mondelo confía en que en la reunión de mañana entre los sindicatos y el Gobierno gallego se llegue a un acuerdo para que el conflicto no se alargue y colapse el sistema aún más. El representante de los letrados gallegos insta también a aumentar la remuneración del turno de oficio y reclama un Pacto por la Justicia con más medios personales y técnicos que permitan agilizar los procesos.

-¿Ve posible un acuerdo entre funcionarios y Xunta para desbloquear la huelga en Xustiza?

-La situación está difícil porque las dos partes han llegado al nivel máximo de exigencia. La Xunta dice que no hará más ofertas y los sindicatos tampoco ceden en sus pretensiones. Para la ciudadanía es muy perjudicial porque afecta a juicios que se aplazarán hasta después de verano o incluso el año que viene. Y si a eso añadimos el retraso que ya de por sí tiene la Justicia, el sistema se va a colapsar aún más.

-¿Cómo afecta este paro indefinido al trabajo de los letrados?

-Nos perjudica porque complica nuestros calendarios y al no poder acudir a los juicios señalados para estos días se va a demorar su resolución y, por tanto, también la remuneración de nuestro trabajo. Cada día de paro sin juicios nuestros ingresos se reducen.

-¿Hasta cuándo podrá resistir el sistema judicial esta situación?

-Otra semana más de huelga ocasionaría un grave daño en la Justicia gallega porque se suspenden cada día el 90% de los juicios programados. Apelamos al diálogo y espero que cuanto antes haya una solución y que en la reunión de mañana se acerquen posturas porque si se prolonga mucho el conflicto nos vamos a un escenario muy preocupante.

-Cuando juró el cargo en julio pidió más salario para el turno de oficio, ¿se ha logrado esa subida?

-En la última negociación con la Xunta hemos conseguido un aumento ligero pero importante porque se incluyen conceptos que antes no se cobraban al no estar incluidos en el baremo de justicia gratuita. La subida se ha aplicado en las partidas que estaban más bajas y que eran las más demandadas como la asistencia al detenido. Pese a que no tenemos queja seguiremos reclamando un incremento de la retribución para tener un salario digno.

-¿En cuánto estaría ese sueldo digno?

-Unos honorarios dignos serían los que se cobran en el mercado pero sabemos que eso es imposible porque cada administración tiene un presupuesto para cada partida y la de Justicia, que debería aumentarse en todas las autonomías, en Galicia no está en los niveles que desearíamos. Aún así, somos de las autonomías que mejor retribuyen el turno de oficio y, además, tenemos la ventaja de que se paga con puntualidad.

-¿Es insuficiente la financiación de la Justicia en Galicia?

-En Justicia siempre faltó dinero a nivel de Estado. La mayoría de los exministros de este ámbito defienden un Pacto por la Justicia y dicen que lo intentaron durante su mandato pero nadie hasta ahora ha dado el paso para lograrlo. No debe haber mucho interés, ya sea por la incapacidad por parte de quien gobierna o porque la oposición hace oídos sordos. Por ser un ministerio tan importante al afectar a tantos derechos fundamentales y a intereses económicos debería estar a la altura por lo menos del Ministerio de Hacienda, que es el que goza de más medios. Nuestra demanda no se ve satisfecha nunca.

-¿A qué ritmo avanza la mediación familiar?

-Desde el Consello da Avogacía y del colegio de abogados hemos realizado varios cursos de mediación y es una vía en la que hay que seguir para evitar conflictos en una materia tan delicada como la de familia. En este ámbito tiene éxito porque permite a las partes dirimir una contienda en la que no tiene que tomar el juez la decisión porque llegan a un consenso entre ellos evitando conflictos entre la familia. Aunque no sean mediadores, la vocación de muchos abogados es tratar de lograr siempre un arreglo amistoso.

-¿Se ha avanzado en la extensión de este sistema a casos penales?

-Es difícil concienciar que una persona que ha sido atacada en sus derechos sea capaz de mediar con quien le ha provocado un daño. Aunque no se descartan avances, la conciencia social no está por la labor de momento.

-Para reducir tiempos se apostó por la digitalización pero los avances que se intentaron como Lexnet causaron problemas.

-Aunque ahora da menos fallos ya es un sistema que quedó obsoleto informáticamente. Hay otros medios que no son más caros y son mucho más eficaces y que ya se aplican en otras comunidades como Navarra, que tiene digitalizado todo el sistema judicial con acceso directo del abogado a los expedientes. Nosotros, mientras, seguimos con una herramienta diseñada hace diez años que se ha quedado obsoleta a pesar del esfuerzo del ministerio para modernizarla y actualizarla.