Frío y nieve son las dos características que mejor definen la meteorología del mes pasado. El último informe climatológico de MeteoGalicia recoge, de hecho, que febrero fue el más frío de los últimos 12 años. La temperatura media en la comunidad se situó 1,6 grados por debajo de los valores habituales y con desviaciones de hasta dos grados en algunos casos en comparación con el dato histórico para este periodo.
En cuanto a las precipitaciones, febrero también fue un mes húmedo que permitió recuperar la capacidad de los embalses y contribuir a paliar los efectos de la sequía. Aunque de media llovió un 18% más que lo habitual en la provincia de Ourense se vivió la situación contraria con déficit hídrico en zonas como las comarcas de Valdeorras, Terra de Trives o el sur del municipio de Verín. Además de las lluvias la gran protagonista del mes pasado fue la nieve, con varias jornadas con alerta amarilla en el interior debido a la caída de copos en cotas muy bajas. Destacan sobre todo el 27 y 28 de febrero con el paso de la borrasca Emma, que debido a la entrada de aire polar procedente de Europa desencadenó varios episodios de nevadas intensas incluso al nieve del mar en zonas de costa y en el norte de la comunidad.
A nivel estatal, los primeros diez días del mes las precipitaciones afectaron a gran parte de España. Desde el nordeste de Galicia hasta el noroeste de Navarra se acumularon más de 100 litros por metro cuadrado. Del 10 al 20 de febrero, las lluvias volvieron a afectar a gran parte del territorio pero con menor intensidad. En esa decena, en zonas del oeste de Galicia, sur de Cantabria y en un área entre el País Vasco y Navarra se acumularon más de 150 litros por metro cuadrado. Desde el día 21 en adelante, todo el territorio nacional se cubrió de precipitaciones. En concreto, se acumularon más de 30 litros por metro cuadrado en el oeste de la comunidad gallega.
