Xunta y sindicatos se sientan hoy a las 12.00 horas de nuevo a la mesa por primera vez desde el pasado 26 de marzo para hallar una salida al conflicto que ha paralizado la Justicia en Galicia, en huelga desde el 7 de febrero y que ya suma 71 jornadas. Las posturas parecen irreconciliables. La administración ofrece subidas salariales de entre 133 y 105 euros mensuales a alcanzar en tres años. El comité de huelga, representado por siete sindicatos, no rebaja su última exigencia de 180. El conflicto ya ha afectado a 20.000 procedimientos judiciales, lo que agrava el crónico retraso de la Justicia.

El desacuerdo se mantiene en los mismos términos que tras el encuentro de finales del mes pasado, cuando la Xunta se levantó de la mesa tras su séptima propuesta de subida económica, principal escollo, aunque no único, en la negociación. También abarca la anulación de descuentos por baja laboral durante los primeros días o la cobertura de vacantes para aliviar la carga laboral.

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, reiteró ayer su oposición elevar su oferta porque considera "inasumibles" las de los sindicatos y cifró en 300 euros al mes el incremento que lograrán los empleados. "Con esa cifra nos sentaremos a la mesa", añadió en Vigo donde un grupo de empleados del sector le recibió al grito de "¡Rueda, dimisión!" y con sonoros abucheos.

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Funcionarios de Xustiza en huelga queman nóminas en A Coruña

El aumento incluye el incremento de la Xunta y el anunciado por el Gobierno de Rajoy para todos los empleados públicos a alcanzar en tres años, lo que mantendría el diferencial entre los 2.700 trabajadores de la Justicia autonómica y el resto de comunidades. Ahí, el vicepresidente, criticado por el comité de huelga, recordó que la oferta de la administración situaría a la plantilla gallega por encima de la media autonómica. La Xunta se ha comprometido a garantizar ese estatus, en cumplimiento, dijo, del acuerdo parlamentario de finales de diciembre. Los gestores ganarían 133 euros mensuales, los tramitadores, 108; y los cuerpos de auxilio, 105. Los forenses, que iniciaron un paro posterior, tienen sobre la mesa 135.

Rueda descartó subir a 180 euros. "Lo fácil sería decir que sí, pero eso no sería responsable ni objetivo porque la Xunta negocia con el dinero de todo el mundo", añadió.

Los trabajadores advierten de la necesidad de mover ficha. El delegado de SPJ-USO, Julio Bouza, mostró su confianza en que la Xunta "se digne a negociar y no a venir con la misma propuesta, que no admitimos". Entre otros elementos, los huelguistas piden aumentos lineales sin diferenciar entre categorías. El tiempo apremia, pues jueces y fiscales también han convocado una huelga para el 22 de mayo, a la que precederán paros parciales de una hora, el primero será mañana a las 12.00 horas.

La oposición responsabilizó a la Xunta de la parálisis judicial. Luís Villares (En Marea) tachó a Rueda y al presidente autonómico Alberto Núñez Feijóo de "pésimos gestores" y les exigió satisfacer las demandas de los trabajadores. El socialista Xoaquín Fernández Leicega los acusó de tratar de "agotar" a la plantilla y la nacionalista Ana Pontón anunció que pedirá la mediación del Consello Galego de Relacións Laborais. Aseguró que la Xunta "humilla" a los empleados.