Eduardo Rubianes (Pontedeume, 1978) es uno de los organizadores del Feirón Medieval dos Andrade, que el próximo mes de julio celebrará su segunda edición tras conseguir congregar, en la primera cita ,a más de 20.000 personas en el casco histórico de Pontedeume.

-El II Feirón Medieval dos Andrade se celebrará el 1, 2 y 3 de julio, ¿por qué esta fecha?

-El año pasado decidimos escoger el primer fin de semana de julio ya que queríamos que se celebrase en verano, para beneficiar a comerciantes y hosteleros, pero que no coincidiera con otras fiestas importantes del municipio. La idea es contar con una fecha fija para que la gente tenga una referencia.

-¿Cómo y cuándo surgió la idea de celebrar esta feria?

-Hace casi dos años. Le presenté la idea a Chus Grandal, que en aquel entonces era la presidenta de la asociación de comerciantes, como una forma de dar a Pontedeume un empujón económico. Le pareció una buena idea, se la expuso a los socios y así llegamos a la primera edición.

-Pontedeume, villa medieval. ¿Se trataba de una apuesta sobre seguro o fue un riesgo?

-A nosotros nos sorprendió de forma positiva. Tuvimos temor a no saber cómo va a ser la respuesta de la gente. Era la prueba de fuego.

-¿Desde ese momento tuvo claro que había que celebrar una segunda edición?

-Sí, por muchos motivos. Si te metes a algo de este calibre, porque requiere mucho trabajo, salvo que sea un desastre, tienes que repetirlo. La gente nos lo pide.

-¿Más nervios ahora que hace un año?

-Tuve más miedo el primer año porque era una experiencia nueva para todos los que formamos la comisión. No teníamos ni idea de cómo se montaba un evento de este tipo y fuimos aprendiendo a base de palos y de golpes. Este año parte de las cosas ya estaban hechas pero nuestro reto para esta edición es crecer un poquito.

-¿En qué sentido?

-Hicimos una campaña de venta de rifas para que la gente de a pie pudiese aportar su granito de arena a la economía del feirón. Se recaudaron 4.000 euros, lo que nos ayuda a dar un pequeño salto, que no queremos que sea demasiado fuerte para crecer poco a poco. No queremos darnos el gustazo de hacer una feria el triple de grande y el año que viene vernos obligados a dar un paso atrás.

-¿De dónde procede su financiación?

-Este año tuvimos dos vías: cuotas para comerciantes y hosteleros y la venta de rifas. Conseguimos superar con creces el presupuesto del año pasado.

-¿Cuentan con el apoyo del Concello?

-Sí, sin su colaboración no se podría celebrar el feirón. Todos los servicios y el apoyo logístico nos lo presta el Ayuntamiento.

-¿Este año también se habilitarán aparcamientos?

-Por supuesto. Serán gratuitos, señalizados, cercanos, limpios y supervisados por Protección Civil.

-La poetisa Eva Veiga ejercerá de pregonera de estas fiestas

-La elegimos a ella por varias razones: porque es de Pontedeume, con gran peso en la cultura de la villa. Siempre intentaremos contar con pregoneros que tengan relación con el municipio.

-Antes hablaba usted de ciertas complicaciones.

-Problemas presupuestarios, imprevistos de última hora... El año pasado, por ejemplo, nos enteramos de que teníamos que disponer de un protocolo de emergencia. Todo debido básicamente al desconocimiento.

-¿Se trata de una feria tipo, como las que se celebran en muchos municipios?

-Cierto es que en gran parte se parece a otras ferias medievales, pero nosotros hacemos dos representaciones teatrales con temática relacionada con la historia de Pontedeume, una de ellas que se estrenará este año. Para ello contamos con miembros de grupos locales de teatro y también necesitamos figurantes.

-¿Con qué otras novedades se encontrarán las personas que acudan al feirón?

-Uno de los cambios más importantes está relacionado con el incremento de actividades para el público infantil. Bajo esta premisa, tendremos un tiovivo, se repetirá la caravana de burritos de Palestina que el año pasado tuvo mucho éxito, y el domingo por la mañana se celebrará un pasacalles especial para niños. Después tendrá lugar un concierto del grupo Palitroke, que adapta canciones infantiles a música tradicional.

-¿Confía en que, con el paso de los años, el Feirón Medieval dos Andrade se considere un evento tradicional de la villa, a la altura de la Festa das Peras o la subida al monte Breamo?

-Ojalá podamos decir dentro de 20 años que nosotros participamos en la creación del feirón pero da un poco de miedo pensarlo. A veces te planteas si habrá gente que quiera coger el testigo, cuando nosotros ya no estemos en la comisión.