Los cuatro individuos que asaltaron una vivienda en Lorbé el pasado domingo por la noche y que amordazaron y golpearon a sus inquilinos se equivocaron de piso. Buscaban a un hombre en relación, supuestamente, a una venta de drogas, pero no se percataron de su error hasta después de dar la brutal paliza a los propietarios, por lo que optaron por darse a la fuga tras robar dinero y objetos como cámaras de vídeo y de fotos, según confirman fuentes cercanas a la investigación.
El incidente ocurrió en la única vivienda plurifamiliar de la zona de Lorbé, en las denominadas Casas Baratas, en una vía anexa a la Rúa Portelo. Se trata de un edificio muy modesto del año 1965 con 16 viviendas y once almacenes, cuyas puertas suelen estar abiertas.
Los inquilinos de estas casas lograron tomar nota de la matrícula del coche y avisaron a la Guardia Civil, que a las pocas horas ya detuvo a dos de los asaltantes, que ayer ya ingresaron en la prisión de Teixeiro, acusados por el juzgado de delitos de robo e intimidación.
El instituto armado también localizó al tercer asaltante que había logrado huir, pero ya estaba muerto, en el interior de una vivienda, a causa de una sobredosis, según certificó un forense. El cuarto y último agresor y ladrón permanecía ayer por la tarde en búsqueda y captura. La Guardia Civil lo ha identificado, por lo que cuenta con su arresto en un plazo breve. Los cuatro asaltantes residían en la comarca coruñesa. La Policía Judicial de la Guardia Civil, en el puesto de Arteixo, se encarga de la investigación.
"Yo vi a cuatro chicos salir corriendo y luego tres detrás de ellos, y nada más", declaró ayer un vecino que reside en una casa cercana y que venía de una finca que cultiva a escasos metros del edificio.
"Aquí algo de trapicheo hay", comentaron en un establecimiento de la zona. "Hace bastante tiempo que se habla de que hay algo de droga por aquí", apuntó otro residente, aunque inquilinos de las Casas Baratas niegan que exista nada de este tipo.
