La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas presumía el pasado 21 de julio que el nuevo trazado de la glorieta de Sabón -que le permitirá ahorrarse 2,7 millones de euros- reduciría el impacto de la obra en un 52%.

El departamento autonómico que dirige Agustín Hernández sostenía aún esta semana que, frente a los 48 terrenos afectados por la obra inicial -que incluía un túnel subterráneo-, el nuevo proyecto de reordenación del tráfico en Sabón solo obligaría a expropiar 26 fincas. "Lo que significa un 52% menos de ocupación", celebraba.

Consultado por este diario sobre la contradicción entre sus manifestaciones públicas y el listado de afectados que ha expuesto el Boletín Oficial del Estado, la Xunta reconocía ayer que minimizó el impacto de la actuación "por un error administrativo".

La Consellería de Infraestrutura rectificó y explicó que el 52% al que apelaba en julio no se corresponderá a la ocupación de terrenos. Este porcentaje, dice ahora, se acercará más al coste de las expropiaciones que, celebra, se reducirán a más de la mitad. Exactamente al 55%. La Consellería también ha variado, aunque en menor proporción, los importes destinados a la expropiación. Finalmente destinará a este concepto 329.550 euros frente a los 400.000 euros que anunció el pasado julio.

La Xunta reconoció ayer que la ocupación con respecto al proyecto inicial sólo se reducirá finalmente en un 21%. En metros cuadrados, la diferencia va de los 4.942 metros cuadrados (396 de ocupación temporal) proyectados inicialmente a 3.913 tras la supresión del paso subterráneo. La Xunta lamentó ayer el error, que achacó a la desactualización del catastro. Lo que no ha variado es la previsión sobre el volumen de tráfico que absorberá la rotonda, que la Xunta cifra en "más de 50.000 coches" (ahora la glorieta soporta el paso de 50.000).

"El error vino de delineación", explicaban ayer desde el departamento autonómico que dirige Agustín Hernández, que ha convocado a los afectados por la obra al levantamiento de actas previas a la ocupación urgente de los terrenos los días 27 y 28 de octubre. Los fallos no sólo se corresponden con el número de las fincas, también con su calificación. Hasta ocho parcelas calificadas como urbanas en el listado de afectados por el proyecto inicial figuran ahora como "labradíos", sin especificar la calificación. "Los datos del catastro tienen numerosos errores y suelen estar desactualizados", justificaban ayer desde la Consellería. Entre los afectados por el proyecto inicial que ya no recoge el proyecto modificado se encuentran las empresas Leyma, Progando, Anjoca o Promociones Buenos Aires. El plan afectará ahora a 31 labradíos, dos casas y casi no toca suelo industrial.