A un mes del inicio del Xacobeo 2010, la Xunta anunciaba que duplicaría las plazas de la red pública de albergues para peregrinos con la construcción de nuevas instalaciones y la habilitación de otras provisionales, pasando así de 2.984 camas a unas 6.000. El Año Santo finalizó, el Xacobeo logró duplicar la recaudación en los albergues -subió la tarifa de tres euros fijada en 2008 a cinco- pero varios de los establecimientos proyectados en la ruta inglesa del Camino de Santiago siguen siendo, dos años después, un proyecto.

Mientras el Gobierno de Núñez Feijóo se defiende de las críticas de la oposición por los recortes aplicados sobre todo en materia de educación y sanidad y a pesar de que el próximo Año Santo no será hasta 2021, en el proyecto contable para 2012 el Ejecutivo autónomo incluye una partida de 608.880 euros para la construcción de un albergue de 18 plazas en Carral y 31.014 para el proyecto modificado de rehabilitación de un antiguo edificio en Betanzos que volverá a la vida como refugio para caminantes y que contará con unas 30 plazas.

Estos proyectos los gestiona la Sociedad Pública de Investimentos (SPI) de Galicia y se incluyen en el proyecto de presupuestos para 2012 de la Xunta por estar recogidos en el Plan Económico Financiero de la entidad. De hecho, esta llegó a adjudicar el albergue de Carral, por lo que de no ejecutarse la obra, podría enfrentarse a la reclamación de una indemnización por parte de la empresa adjudicataria, Francisco Gómez y Cia SL. Lo hizo el pasado mes de enero por 516.000 euros. La SPI había sacado a licitación el proyecto medio año antes, por casi 700.000 euros.

En cuanto al albergue de Betanzos, las obras, adjudicadas a Construcciones Ángel Jove por 417.270 euros y con un plazo de ejecución de ocho meses, comenzaron hace un año y fueron paralizadas en varias ocasiones. El pasado mes de febrero, la constructora se topó con varios restos arqueológicos que retrasaron aún más el proyecto de rehabilitación del inmueble, situado en el casco histórico, en la confluencia de las calles Pescadería y Ferreiros.

A finales de 2009, la Xunta también se comprometió a dotar a la localidad de Pontedeume de un albergue para peregrinos. El Concello propuso rehabilitar para ello el antiguo hospitalillo, pero finalmente, y de forma "provisional", se acondicionó una parte de las antiguas lonjas de Raxoi. Las obras se inauguraron hace un año.