La Consellería de Educación y el Ayuntamiento han acordado cambiar la cubierta del gimnasio del colegio Ponte dos Brozos. La instalación presenta goteras desde hace años que, en los últimos meses, se agudizaron, por lo que el alcalde, Carlos Calvelo, solicitó a la Xunta el cambio integral de la cubierta, apunta el Concello.
Las goteras de la cubierta del gimnasio habían sido solucionadas de modo provisional, pero volvieron a aparecer y con mayor intensidad que antes, por lo que el regidor descartó reparar la cubierta de nuevo y abogó por cambiarla. La decisión de sustituir la cubierta con una nueva se consensuó en una reunión entre el alcalde y los responsables territoriales de la Consellería de Educación.
Las obras para sustituir la cubierta del gimnasio se realizarán en verano. La fecha para la ejecución de los trabajos coincidirá con las vacaciones estivales, de modo que no altere el funcionamiento del centro.
Pabellón de Meicende
La reforma del pabellón del colegio San Xosé Obreiro, de Meicende, irá acompañada de una mejora de la pista polideportiva exterior y de la accesibilidad del recinto. Los trabajos incluirán la habilitación de una entrada a través del parque de la iglesia de Meicende.
La renovación integral de la infraestructura podrá realizarse, señala el Ayuntamiento, gracias a una prórroga de una subvención de 300.000 euros de la Diputación. El Ayuntamiento aportará 100.000 euros, de modo que la inversión total en la reforma del pabellón será de 400.000 euros. Los trabajos cambiarán la ubicación de las gradas y suprimirán una esquina del pabellón, construida fuera de ordenación urbanística. La eliminación de esta esquina permitirá ampliar la calle que circunda la instalación.
La calle se convertirá en peatonal durante las entradas y salidas de los menores del centro. Para restringir la circulación de vehículos en momentos determinados, se instalarán bolardos automáticos.
El Concello asegura que, en la actualidad, la seguridad en los alrededores del colegio figura entre las mayores preocupaciones de los vecinos de la zona. El tráfico de coches, apunta el Ayuntamiento, dificulta la entrada y salida de los escolares a pesar de la vigilancia policial diaria. Calvelo asegura que la inversión "permitirá mejorar las condiciones de seguridad y accesibilidad del centro".
