La Asociación de Padres de Alumnos (APA) del colegio Valle Inclán de Oleiros está pendiente aún de cobrar la subvención de la Consellería de Educación para el servicio de comedor del curso pasado, unos 21.000 euros. La demora en el cobro de esta ayuda ha puesto en apuros a la APA porque ya se inició el nuevo curso. Si no reciben este pago a partir de diciembre se tendrían que plantear la subida de la tarifa del comedor escolar que gestiona la propia entidad y que cuesta actualmente 5,75 euros.
El retraso en la ayuda también ha hecho que aún adeuden un pago de 5.000 euros a la empresa que tiene contratada la APA para realizar las comidas del comedor. "Sí, en la Xunta nos han dicho que están pendientes de salir las subvenciones, que son 700.000 euros para toda Galicia los que tienen reservados, pero nosotros necesitamos la subvención ya para no tener que subir precios. Por ahora, hasta diciembre, vamos a cobrar igual", confirmó ayer el presidente de la APA del Valle Inclán, Guillermo Reis.
Este curso hay casi 200 niños en el servicio de comedor y salen a 0,50 céntimos por niño, comida y día con el precio actual. La asociación de padres de este centro educativo realiza un titánico esfuerzo de organización, coordinación y gestión pues no sólo se encarga del servicio de comedor sino que también es responsable del programa de madrugadores (guardería) y del programa de actividades extraescolares.
La Asociación de Padres de Alumnos también ha reclamado una serie de mejoras en el centro, que tiene unos treinta años. El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, anunció ayer que trasladará esta petición a la Xunta pues el Concello solo se encarga, en los colegios, del mantenimiento. El principal problema en el colegio es la cubierta de cristal que convierte el centro en un invernadero en verano y que además supone un elevado gasto en mantenimiento por la limpieza periódica que requieren los cristales. Por encima, todos los años sufren goteras al filtrarse el agua.
"A partir de mayo te asas aquí, entra mucha luz y hace mucho calor. Luego los cristales se llenan de porquería y hay que limpiarlos cada poco y se abren las juntas que deben ser de silicona o así y llamas al Concello y te lo arreglan rápido, pero la solución es poner otra cubierta distinta o una de un cristal más adecuado", explicó Guillermo.
La APA también solicita que se ponga una cubierta a una de las dos pistas polideportivas existentes para que además del pabellón municipal exista otra instalación en la que pueda jugar otro grupo de forma simultánea. Piden también un comedor "de verdad" en lugar del espacio "modular" instalado.
