La Consellería de Educación confirmó ayer que visitará el colegio Valle Inclán de Oleiros para examinar las obras de mejora demandadas por los padres y el Concello. El principal problema del centro es el cubierta de cristal, que convierte el edificio en un invernadero en verano, y además, supone un elevado gasto en mantenimiento por la limpieza que requieren los cristales. A esto hay que añadir las goteras que soporta periódicamente cuando empieza a llover, tal como denuncian desde la Asociación de Padres de Alumnos (APA).

La entidad también solicita que se instale una cubierta en una de las pistas polideportivas que hay, así como un comedor "de verdad" para sustituir el espacio modular que existe en estos momentos. Los padres reconocen que el centro necesita una reforma integral, puesto que cuenta con treinta años de antigüedad.

El alcalde, Ángel García Seoane, anunció que solicitará una entrevista con responsables de la Consellería de Educación para resolver estas deficiencias, puesto que el Concello solo se encarga de su mantenimiento y el resto es competencia de la Xunta. El regidor demanda que se solucionen cuanto antes los problemas más urgentes como la cubierta y la red eléctrica de uno de los edificios que componen el centro.

La APA del Valle Inclán también expresó hace unos días su malestar porque la Consellería de Educación todavía no les abonó la ayuda para el servicio de comedor que corresponde el curso pasado, que asciende a 21.000 euros. La entidad reconoció que si no recibe la subvención antes del mes de diciembre se verá obligada a incrementar la tarifa del comedor que gestiona la propia asociación y cuesta un total de 5,75 euros.