Estricto cumplimiento en los horarios de cierre y en el nivel de ruido y vigilancia sobre los locales que cambian continuamente de dueño. Estas son algunas de las actuaciones que se van a llevar a cabo en la zona de copas de Santa Cristina para evitar sucesos como el del pasado 25 de diciembre en el que dos agentes de la Policía Local se vieron obligados a disparar al aire al verse cercados y agredidos por un grupo de hasta cuarenta personas después de intentar mediar en una pelea a las seis de la madrugada.

El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, ha convocado la Junta Local de Seguridad esta semana para analizar estos recientes hechos y las medidas que se deben tomar. En la reunión participaron Gobierno local, Guardia Civil, Policía Local, Emergencias y Protección Civil y Consellería de Presidencia.

García Seoane señaló que antes de que trascendiese la agresión a los agentes, que causó la detención de cinco personas, ya se habían detectado "problemas" que luego se vio que se "agigantaron". Por esta razón ahora se van a "tomar medidas contundentes" y no se descarta incluso "clausurar algunos locales" porque "está empezando a haber alguna gente no deseada".

El regidor señaló que existen locales que cierran sus puertas al llegar la hora pero sin embargo la gente sigue dentro durante horas. También se controlará que no se produzcan "actividades medio mafiosillas" que al parecer existen desde hace algún tiempo.

"No pueden aparecer aquí actividades como trapicheo ni prostitución", resaltó García Seoane, quien aseguró además que las personas relacionadas con este tipo de actividades "ya están localizadas". Agregó que en Santa Cristina existen muchos locales, cafeterías, comercios, restaurantes o pubs, "que no tienen ningún problema".

Los locales de copas de Santa Cristina que pasan de unas manos a otras en intervalos muy cortos de tiempo es una constante. El pasado diciembre se publicitó en páginas de anuncios en internet el alquiler o traspaso de un local en la calle Humboldt.

Desde noviembre del año pasado existe un anuncio de alquiler de un pub de 87 metros cuadrados que se presenta como acondicionado, con licencia e insonorizado, por 400 euros al mes. El responsable de un pub en Santa Cristina también anuncia el alquiler de su local por 500 euros al mes; mientras otro de 225 metros cuadrados afirma contar con "buena reputación, sitio distinguido y bien acreditado", además de un "precio razonable".