Una vecina de Camariñas, Guadalupe Elena Alvite Alborés, presentó una demanda contra el Concello por la supuesta "usurpación" de un terreno de su propiedad para la construcción del tanatorio municipal que comenzó en el pasado mes de noviembre. La demandante reclama la paralización de las obras y la devolución de las propiedades afectadas, así como la reposición de un muro que había en la zona que fue derrumbado cuando comenzaron los trabajos.
Según se recoge en la demanda presentada en el juzgado de lo Contencioso-administrativo número 3 de A Coruña, "el Ayuntamiento de Camariñas no ha iniciado ningún procedimiento administrativo para hacerse legalmente con la franja de terreno de 48,31 metros cuadrados, ni para demoler el muro y talud de separación entre ambas propiedades ni para dañar el muro del portalón de entrada al garaje" propiedad de la mujer.
En el texto también se alude a supuestas irregularidades cometidas por el Concello para la construcción del tanatorio en un terreno donado por una entidad de la localidad, la Fundación Fernández Espín, a cambio de tres condiciones: la edificación de la casa mortuoria con el nombre de la fundación, la recuperación de todos sus bienes y su incorporación al plan general como terrenos de equipamientos y dotaciones, que supone que no se podrá construir en ellos. "El Ayuntamiento ha aceptado una donación en contra de la ley, pues basta comprobar el valor catastral de la finca con el coste de edificación del tanatorio para ver claramente que la donación conlleva un resultado patrimonial negativo para la entidad local y una infracción del artículo 12.2 del reglamento de bienes de las corporaciones municipales y en contra del procedimiento establecido, incurriendo en un acto nulo de pleno derecho", recoge el texto.
La secretaria municipal ya emitió un informe negativo el 24 de febrero de 2011 a la cesión de los terrenos de la fundación alegando la ausencia de un estudio económico sobre el coste de las condiciones impuestas, que la recuperación de los bienes corresponde únicamente a la fundación y su imposibilidad de incluirlos en el planeamiento urbanístico -aprobado recientemente- a no ser que se hiciese como un convenio urbanístico, algo que no se hizo, según explica la defensa de la parte demandante, que alega "múltiples irregularidades en todo el proceso, de tipo penal y administrativo".
La demandante ya denunció los hechos en las dependencias de la Policía Local de Camariñas en el pasado mes de diciembre para que se levantase acta de los daños provocados y de la usurpación de los terrenos al defender que la obra del tanatorio llega hasta el pavimento de la calle Sotavento. Según explicó la hija de la denunciante, Guadalupe Vázquez Alvite, cuando se puso en contacto con el alcalde para advertirle de la invasión de sus propiedades, el regidor defendió que el terreno no era suyo y la emplazó a demostrar sus propiedades.
La obra del tanatorio ya resultó muy polémica desde su aprobación y el PP de Camariñas (el único grupo de la oposición) advirtió de diversas irregularidades en el proceso, aunque finalmente salió adelante. El Concello recibió una subvención de la Diputación de 390.000 para este edificio, que después fue adjudicado en 380.000 euros.
La cooperativa funeraria de Camariñas y otros vecinos particulares también presentaron sendas denuncias contra el Concello por esta obra. En un auto emitido recientemente el juzgado rechazó la suspensión cautelar de las obras que pedía la cooperativa.
