Lucía Vázquez y Alejandro Ferreiro han vivido una experiencia única y que, explican, les ha abierto las puertas del mercado laboral en el extranjero. Una oportunidad que les ha brindado el Ayuntamiento con la concesión de dos becas de excelencia, una iniciativa pionera en el municipio y que la Administración local prevé extender este curso a otros centros educativos.

Un reconocimiento a sus excelentes expedientes académicos que les ha brindado la oportunidad de realizar, durante tres meses, prácticas en otros países. La estudiante de Gestión Administrativa Lucía Vázquez viajó el pasado verano a Londres para trabajar en una librería. A sus 21 años admite que sus primeros días no fueron fáciles pero que, superadas las trabas iniciales, la experiencia resultó inigualable, por lo que sopesa la idea de regresar. "La propietaria de la librería me ha ofrecido continuar con mi trabajo allí", apunta. Una propuesta que no descarta en absoluto.

Similar ha sido la experiencia de Alejandro Ferreiro, de 27 años. "Llevaba años en la facultad de Ciencias del Deporte y la Educación Física y nunca conseguía una beca Erasmus; me decanté por hacer un ciclo medio de Actividades Físicas en el Medio Natural y surgió esta oportunidad de realizar prácticas en el extranjero". Sus amplios conocimientos de inglés facilitaron su integración en una escuela de idiomas de Irlanda, en la que este arteixán realizó durante dos meses labores de monitor con niños pequeños procedentes de distintos lugares de Europa.

El mes restante lo pasó en una escuela de fútbol. "En ningún momento tuve la sensación de estar trabajando; ha sido una experiencia que recomiendo a todo el mundo", apostilla, al tiempo que recuerda que en un momento de recortes en becas y ayudas en educación todo el esfuerzo que se haga desde las administraciones locales es necesario. Las puertas quedaron también abiertas en Irlanda para Alejandro Ferreiro, que espera poder trabajar en la escuela de idiomas el próximo verano. El coordinador de Relaciones Internacionales del instituto de Sabón, Eladio Suárez, aplaude esta iniciativa después de años de observar como la escasez de fondos resultaba el principal escollo para los alumnos a la hora de viajar al extranjero para realizar sus prácticas. "Nunca se animaba nadie y ahora ya hay varias solicitudes", señala.