La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas aún no ha resuelto las alegaciones al enlace de la vía ártabra al puerto de Sada. El departamento autonómico informó ayer a este diario que "tantea" otros trazados para evitar el impacto ambiental y patrimonial del vial y el falso túnel proyectado en el entorno de Morazón. El Gobierno gallego pretende evitar la afectación al castillo de Fontán, pero subraya que no se ha decantado por ninguna opción.

Su versión contrasta con la del Concello de Sada, que emitió hace meses un comunicado en el que aseguraba que la Xunta había aceptado ya su alegación para desviar quince metros el trazado. Medio Ambiente guarda silencio sobre esta posibilidad y mantiene que las opciones de trazado siguen abiertas.

La Axencia Xeral de Infraestruturas atribuye el retraso en resolver las alegaciones a la necesidad de estudiar una cartografía más detallada de algunas zonas. "Esta nueva cartografía está en elaboración, por lo que por el momento no se puede concretar las modificaciones que finalmente se podrán atender", sostienen desde el departamento que dirige Agustín Hernández.

El anteproyecto de este vial provocó las protestas de los grupos ecologistas y culturales por su impacto en la costa de Morazón y en las ruinas del castillo de Fontán, catalogado como Bien de Interés Cultural. Una de las actuaciones más polémicas la constituye el falso túnel de 200 metros en Morazón. Oposición y ecologistas exigieron en sus respectivas alegaciones la supresión del falso túnel. El Concello, en cambio, optó por solicitar su ampliación hasta los 450 metros para evitar que partiese esta zona del litoral e intentar compatibilizar la actuación con el parque que proyecta en la zona el plan general. La Xunta ha evitado hasta ahora pronuciarse sobre este punto.