El elevado coste de la Feira do poco celta de Arteixo hace peligrar su tercera edición. El presidente de la Asociación de Comerciantes de Arteixo, Luis Espiñeira, admite que la feria que organiza desde 2012 está " en el aire" por la complejidad que conlleva su organización y el esfuerzo inversor del que requiere.

"Desde la asociación estamos analizando los pros y los contras", apunta el representante de los comerciantes, que expuso ayer los 800 kilos de comida adquirida con el dinero recaudado en la fiesta solidaria que cada año organizan el día de Fin de Año y que entregarán a Cáritas Arteixo. Cerca de 800 euros invertidos principalmente en cacao y galletas, alimentos solicitados por la organización benéfica. Inmersos ya en la campaña de rebajas, el colectivo organiza la programación para este año. "Habrá iniciativas que se repitan pero también otras nuevas", avanza Espiñeira.