El Concello de Oza-Cesuras ha remitido a la Xunta para su evaluación ambiental un plan especial de equipamiento en suelo rústico que permitirá construir una residencia geriátrica privada en Porzomillos. Los terrenos pertenecen a la empresa Lucus Residencial y, como recoge el propio plan, están ubicados en la "parte más alta" de un monte del lugar de Castrillón.
La finca ocupa una superficie de 25.398 metros cuadrados y el plan especial permitirá recalificarla como sistema general de equipamiento sanitario-asistencial. El edificio tendrá una superficie aproximada de 4.990 metros cuadrados y una altura máxima de dos plantas.
La reordenación del ámbito que propone el documento de inicio del plan especial, que deberá obtener el visto bueno de la Xunta, pasa por habilitar una zona de aparcamiento de 1.750 metros cuadrados y un jardín de 18.568 metros cuadrados. Según recoge el proyecto, la residencia geriátrica deberá tener una tipología "congruente con las rurales y tradicionales del entorno".
Los promotores de la actuación defienden la ubicación escogida, en una parroquia del extinto concello de Oza dos Ríos y en lo alto de un monte, apelando a su buena comunicación viaria. "La localización obedece a razones geográficas y de inserción territorial y social", recoge el plan, que destaca la buena comunicación entre la residencia y la comarca a través de la autovía A-6 y la Nacional-VI.
El estudio incide además en que el "emplazamiento se ubica relativamente próximo a los dos núcleos urbanos principales". Los promotores destacan que en el ámbito y en su entorno "no existe ningún elemento estratégico ni natural ni cultural de especial interés". La arquitecta encargada de la redacción del plan apela a las ventajas sociales y económicas, aunque admite la necesidad de prestar "especial atención en el diseño y construcción para minimizar el impacto ambiental".
La empresa propietaria del ámbito, Lucus Residencial, promueve una urbanización de noventa viviendas unifamiliares en el lugar de Pena, en Coirós.
La tramitación de este geriátrico arranca sin que la Xunta haya iniciado la redacción de la residencia que prometía el plan de viabilidad de la fusión. Oza-Cesuras es un municipio con un elevado índice de envejecimiento y carece de infraestructuras para atender la demanda. La Consellería de Traballo e Benestar se comprometió durante la negociación de la alianza municipal entre Oza y Cesuras a tramitar un proyecto para rehabilitar el antiguo sanatorio de tuberculosos, en O Paraxón, en una residencia para mayores.
El plan de viabilidad de la fusión incluía unos planos con las recreaciones de este geriátrico para el que la Xunta no ha consignado ninguna partida en los últimos años. El Gobierno gallego estimaba que la restauración del emblemático edificio diseñado por González Villar, en completa ruina, costaría alrededor de dos millones de euros.
La Xunta elude pronunciarse sobre este proyecto, que supedita ahora a un plan de viabilidad previo. La ausencia de partidas para redactar el proyecto ha suscitado numerosas críticas de la oposición del municipio fusionado, que cargan contra el PP por "vender humo".
La residencia que promueve ahora una empresa está en su fase más inicial. La Xunta acaba de publicar el documento previo del plan especial para ordenar el ámbito y la Consellería de Medio Ambiente deberá decidir si se somete o no a evaluación ambiental. Después todavía tendrá que redactarse una memoria y el documento a aprobación definitiva.
