Las rectorales de Pravio y Bribes han vivido una larga espera hasta ver algo de luz al final del túnel. La primera, anexa a una escuela infantil, ya ha experimentado las mejoras que se comprometió a llevar a cabo el Ayuntamiento a cambio de la cesión del jardín interior por parte del Arzobispado de Santiago. La segunda, con riesgo de derrumbe y el techo desplomado tras un temporal, cuenta ahora, al menos, con el compromiso del ente eclesiástico de intentar rehabilitarla, afirma el Concello.

El Arzobispado le ha trasladado su compromiso de restaurar el conjunto de la iglesia de San Cibrán de Bribes en cuanto tenga posibilidad de financiar los trabajos, asegura el Concello. Mientras, el inmueble acumula casi una década con riesgo de derrumbe, como ya alertaba un informe de los técnicos municipales de 2006, tras varios requerimientos al ente eclesiástico por parte del Ayuntamiento.

Este mes se cumple un año desde que el Ejecutivo cambrés exigiera que se tomaran medidas para evitar el desplome de las dos rectorales. El Gobierno local advirtió del peligro de derrumbe por el estado ruinoso de los conjuntos y denunció el riesgo de que cayesen elementos en mal estado del exterior del inmueble al patio de escuela infantil de Pravio, que llegó a cerrarse por seguridad.

El peligro se ha eliminado y, además, los escolares podrán disfrutar de un nuevo espacio de juegos en la próxima primavera, anuncia el Ejecutivo cambrés. En cumplimiento del acuerdo para la cesión del jardín interior de la rectoral de Pravio, el Concello ha ejecutado mejoras en las ventanas, ha adecentado parte de la fachada y ha arreglado el jardín que pasará a convertirse en espacio de juegos en unos meses.

El convenio entre el Ayuntamiento y el Arzobispado en virtud del cual el ente municipal asume las reparaciones a cambio de la cesión del jardín ya está firmado. El Concello espera recibir el documento definitivo por parte del departamento eclesiástico. El acuerdo llegó después de que el Arzobispado obviara las advertencias del Concello, que en enero del año pasado le dio un mes de plazo para elaborar un proyecto de rehabilitación de la rectoral de Pravio.

La rectoral de Bribes corrió otra suerte. Un mes después del aviso del Ayuntamiento, un temporal provocó el derrumbe del tejado. La recuperación depende ahora de que el Arzobispado logre financiarla.