La asociación ecologista Adega reclamó ayer una nueva evaluación ambiental del proyecto de regeneración ambiental de la ría de Betanzos, que incluye rellenos en Sada, Gandarío y Miño. El colectivo, al igual que la Sociedade Galega de Historial Natural, alertan del impacto de una actuación que "prevé mover 886.000 metros cúbicos de arena desde el exterior de la ría hasta las playas de Miño, Sada y Bergondo" y que supondrá un gasto de 8,6 millones.

Adega incide en que la Declaración de Impacto Ambiental fue elaborada en 2010 y que tenía una validez de cinco años "que ya venció". "En el propio documento se reconocen posibles alteraciones en los recursos pesqueros y marisqueros y en los valores patrimoniales y naturales de la zona", inciden desde el colectivo ecologista.

La asociación advierte de que se trata de una actuación "muy costosa" que "no solucionará definitivamente el problema". "La propia Demarcación de Costas recoge en la documentación que en poco tiempo habrá que intervenir nuevamente y poner más arena y dinero", denuncia Adega en un comunicado remitido a los medios.

El colectivo reclama que se revise la Declaración de Impacto Ambiental y que se dé oportunidad a los ciudadanos interesados de consultar y alegar contra un proyecto redactado hace ya cinco años y en el que se han introducido varias modificaciones.

Costas ya ha licitado la primera fase del proyecto, que se centra en la playa de Sada.