"Debe ser una de las cuestas con más pendiente de España. Fíjate si es famosa que antes se probaban los coches en ella. Si conseguían subirla, comprabas el coche", explica un vecino de la parroquia de Montouto, en Abegondo, al recordar que debido a que se pintó una doble línea continua en esta carretera AC-542 entre Betanzos y Mesón do Vento, ahora tienen que dar rodeos de cuatro kilómetros para ir a sus casas cuando antes solo tenían que recorrer 300 metros y además tienen que lidiar con esta fuerte pendiente.

El problema que sufren, y que afecta a unas veinte familias de los lugares de O Franco y O Couto nació en 2009, cuando se mejoró la carretera y se procedió al pintado de la doble línea continua en el kilómetro 14,5, donde hasta entonces había una línea discontinua que permitía a los vecinos girar a la izquierda e ir a sus casas. El problema se originó hace seis años pero han empezado sus protestas, cortando el tráfico, realizando manifestaciones y enviando escritos a la Xunta, a Tráfico y a la Delegación del Gobierno, hace este mes tres años.

"No solo somos nosotros, unos cuarenta afectados, son también el cartero, el panadero, el del butano. Ahora tienen que dar un rodeo de cuatro kilómetros para llevar una barra del pan, pierden dinero", señala uno de estos afectados, que reclaman una isleta y un stop para poder cruzar hacia la pista que lleva a sus casas.

La Consellería de Infraestruturas rechazó su demanda al señalar que tras analizar la situación los técnicos habían concluido que si se permitiese el giro a la izquierda se "aumentaría el riesgo" de colisión entre coches. Agregó además que el problema se solucionaría con la glorieta prevista un kilómetro después.

Los vecinos, sin embargo, aseguran que en esta zona no hay prácticamente accidentes y que la glorieta no les soluciona nada. Ahora preparan un informe para presentar ante distintos organismos para demostrar que en otros lugares sin accidentes sí se permitió el giro a la izquierda tras la petición de vecinos afectados.