La nueva canalización que dará suministro a Arteixo empezará a construirse el próximo verano. Así lo anunció el alcalde, Carlos Calvelo, en una reunión que mantuvo ayer con su homólogo de A Coruña, Xulio Ferreiro, en María Pita. "Ahora toca la redacción del proyecto técnico, que nos urge, y después la licitación", explicó. El Concello de A Coruña tiene que dar también su visto bueno porque parte de la canalización pasará por su territorio. Ferreiro afirmó que su Ayuntamiento asumirá el papel de "colaborar con el resto de municipios".

Esta nueva tubería partirá de los depósitos de Penamoa, en A Coruña, e irá por la costa hasta el polígono de Sabón. Servirá también para abastecer de agua el puerto exterior de punta Langosteira. El coste de la nueva tubería será de seis millones de euros y lo financiarán el Ayuntamiento de Arteixo, la Diputación y la Autoridad Portuaria.

Con este proyecto desaparecerá la estación de bombeo de Meicende, adonde llega el agua desde los depósitos de Penamoa. El regidor arteixán advierte de que la red actual es de fibrocemento y que "el día que pase algo" el Concello tendrá "un problema muy grave". "Mejoraríamos toda la red y supondría un ahorro energético de 20.000 euros al mes del bombeo principal", asegura Carlos Calvelo.

Otro de los puntos que trataron los dos regidores en la reunión de ayer fue un convenio por el cual Emalcsa calcularía las facturas de los clientes de Arteixo, ya que el Concello le compra el agua a la empresa pública coruñesa. El coste que tendrá para las arcas arteixanas será de 18.000 euros al año aproximadamente, según el Gobierno local. Emalcsa ya prestaba este servicio desde hace dos años, cuando el Concello puso fin a Augarsa.