El Concello restaurará un puente de origen medieval situado en A Queira, en el valle de Loureda. Entre los vecinos de la zona es más conocido como Ponte Nova, que era un lugar de paso obligatorio hasta que a mediados del siglo XX se construyó la carretera que actualmente vertebra Loureda. En ese momento el puente quedó en desuso.

El Concello acometió en los últimos días los trabajos de desbroce en la zona para limpiar el antiguo camino y así poder realizar una labor de reconocimiento exacta del estado del puente y sus alrededores. Durante estos trabajos los operarios descubrieron varias piedras en el cauce del río que lo atraviesa y que se podrán recuperar durante la restauración del puente.

Será una arqueóloga la que realice el proyecto para el arreglo de este paso sobre el río. El Ayuntamiento también se ha puesto en contacto con el departamento de Patrimonio de la Xunta para que gestione los permisos para acometer la restauración de esta pieza del patrimonio arteixán. El Gobierno local calcula que la inversión en esta obra podría rondar los 30.000 euros. "Este tipo de actuaciones tienen una doble vertiente: recuperar patrimonio histórico y poner en valor lugares e infraestructuras antiguas que eran desconocidas para muchos de los vecinos del concello", explica el alcalde, Carlos Calvelo, que visitó el lugar junto con el concejal de Obras y Servicios, José Ramón Amado.