La visita del conselleiro de Educación, Román Rodríguez, al instituto de Culleredo dio pie a la Xunta a anunciar un nuevo y ansiado equipamiento en el municipio, el colegio. El conselleiro avanzó la firma "en breve" del convenio de cesión de la parcela con el Concello para comenzar las obras el próximo año.

Román Rodríguez justificó la demora en la necesidad de que el Concello "desvíe un colector de saneamiento de la parcela". Un "requisito imprescindible" que, según apostilló el alcalde, Julio Sacristán, "ya está hecho". El regidor cullerdense, que demanda desde hace años un nuevo centro de infantil y primaria, tomó la palabra en el acto para precisar que el Concello ya expropió los terrenos necesarios en la avenida de Rutis y aprobó en pleno su cesión a la Xunta.

El alcalde aprovechó la visita, a la que acudieron altos cargos de la Xunta y responsables municipales, para reclamar la consignación necesaria para el CEIP en los presupuestos de 2016, para que esté en funcionamiento en el curso 2016/17.

Aunque más bien reacio a fijar plazos concretos, Román Rodríguez, avanzó que su objetivo es que el colegio esté en funcionamiento para el curso 2017/18. Con todo, el responsable autonómico se mostró cauto y apostilló que los plazos podrían variar si surge alguna incidencia durante la tramitación del contrato y la ejecución de la obra.

Nuevo instituto

Los responsables autonómicos y municipales aprovecharon la visita para explicar los detalles del nuevo instituto que abrirá sus puertas previsiblemente en diciembre. El centro dispondrá de 16 aulas (12 de ESO y cuatro de Bachillerato) con capacidad para acoger a 480 alumnos. El edificio dispondrá de tres plantas y un sótano.

La planta baja se dedicará principalmente a albergar los servicios administrativos y de gestión, como la secretaría, la sala de profesores, reprografía y los despachos de dirección, jefatura de estudios, ANPA, alumnos y orientación educativa.

La primera planta albergará las aulas de música y dramatización, dibujo, informática y la biblioteca, seminarios, cocina y cafetería. La segunda acogerá las aulas y el sótano el gimnasio y los vestuarios.

El diseño del edificio estará en sintonía con la Universidad Laboral situado en las inmediaciones. El acceso al instituto se realizará por la misma puerta del recinto.