Una excavadora y unos obreros que ayer por la mañana acudieron al entorno de la capilla de San Marcos en Nós para ejecutar unos nuevos postes de cemento para una línea de alta tensión, se fueron sin apenas iniciar los trabajos al impedírselo los vecinos, entre ellos los integrantes de la asociación para la restauración de la capilla de San Marcos.

Esta entidad se creó hace unos meses para restaurar la capilla, del siglo XVIII, después de que sufriese graves daños en el tejado por los pasados temporales. Tras reunir parte del dinero para sufragar la obra mediante aportaciones vecinales voluntarias y poner una parte el Arzobispado, el Concello colaboró poniendo la mano de obra. Varios operarios municipales empezaron esta semana a colocar las vigas de pino rojo del tejado y los residentes en el entorno que suelen contemplar estos trabajos advirtieron ayer la presencia de estas máquinas y se acercaron para saber qué iban a hacer.

"Dijeron que venían de Fenosa y que iban a hacer unos postes nuevos porque los actuales están muy mal, ya en su día fueron arreglados. Empezaron a excavar justo detrás y es cuando los paramos y llamamos al Concello", explicó uno de los vecinos de la asociación, Francisco Vázquez.

El Ayuntamiento señaló que estos trabajos necesitan autorización de la concejalía de Obras y también de Urbanismo porque afectan a una finca privada, y no se solicitaron por lo que reclamaron su paralización. En el Concello tampoco les consta que Fenosa tenga el permiso de la Dirección Xeral de Patrimonio, necesario porque la obra se hace a escasos metros de esta capilla. En este tipo de actuaciones también suele ser preciso el permiso de Industria.

La Asociación de Vecinos para la Restauración de la Capela de San Marcos aprovechará ahora para presentar un escrito ante Gas Natural-Fenosa en el que solicitará que soterre las líneas de alta tensión solo en el tramo que cruza el adro junto a la capilla para evitar situaciones peligrosas para las personas.

"Durante las fiestas ponemos una carpa y es muy peligroso porque tiene unos diez metros de altura y para instalarla tiene que subir alguien arriba y este año estuvo muy cerca de los cables de alta tensión y eso que no estaba subida de todo. Un día cae un cable en la carpa y chamusca a alguien", destacó Vázquez. Otro vecino, Roberto Rioboo, señaló que un cable de la línea (a la altura de donde se coloca la carpa de las fiestas) ya rompió hace un tiempo y tuvo que ser empalmado, un arreglo que es visible a simple vista.

Estos residentes señalan que unos metros más abajo, ya en Cambre, Fenosa sí que soterró el cableado, en un tramo aún más pequeño, delante de una empresa.