-En la comarca, Oleiros ha asumido el papel de líder en la lucha contra las invasoras.

-Más que líder, podría decirse que ha sido el primero en iniciar la lucha sistemática. Ha sido el primer concello en marcar una política clara en la forma de actuar y de informar cómo actuar.

-Llevan años combatiendo la amenaza...

-Sí, sobre todo los tres o cuatro últimos años.

-La especie más conocida es el plumacho

-Sí. En Oleiros tenemos localizadas cinco especies invasoras. La más preocupante es el plumacho y la otra, la uña de gato.

-¿Echan en falta más implicación de la Xunta?

-Desde luego. La lucha contra ese tipo de plagas no está coordinada y si no es con una política marcada por un organismo supramunicipal resulta muy complicada. Los concellos que nos esforzamos por combatir estas plagas nos sentimos muy defraudados porque el apoyo institucional es mínimo. Hay que tener en cuenta que una sola planta de hierba de la Pampa puede llegar a producir unas 50.000 semillas en una temporada. Son tan pequeñas que el viento las dispersa con muchísima facilidad. Y, claro, si en un concello se trabaja fuertemente por erradicarlas y en el concello de al lado no se hace nada, pues tendrá que seguir trabajando constantemente, gastando dinero público constantemente para eliminarla.

-¿Hay algún entorno natural que les preocupe especialmente?

-Si, en la costa de Dexo, el monumento natural más importante que tenemos, han aparecido plumachos, aunque los eliminamos lo antes posible. En la zona del parque forestal de Liáns también estamos intentando erradicar todos los rebrotes, pero como linda con algunas fincas privadas muy llenas de plumachos nos vemos limitados, porque tenemos que iniciar los trámites de ejecución subisidiaria y llevan su tiempo. También nos preocupa mucho el impacto en la laguna de Mera.