El presidente y la vicepresidenta de la Diputación, Valentín González Formoso (PSOE) y Goretti Sanmartín (BNG), convocaron ayer a los alcaldes de la provincia para informarles del nuevo plan de inversión dotado de más de 30 millones. Se trata del Plan de Acción Social (PAS), que tiene como objetivo financiar actuaciones de "interés social" que "mejoren las condiciones de vida de la población".

Entre los trabajos que los concellos de la provincia podrán acometer con cargo a este plan están las mejoras en los servicios básicos, como agua y saneamiento, alumbrado, transporte o recogida de basuras; las obras de acondicionamiento de parques y jardines; o las destinados a la eliminación de barreras arquitectónicas y a la conservación de instalaciones deportivas y culturales.

Las obras tendrán que tener un importe mínimo de 30.000 euros y una vida útil superior a los 5 años. Los concellos deberán destinar como mínimo el 60% de la ayuda a la realización de "inversiones sostenibles" que tengan un "carácter social". El 40% restante podrá destinarse a cualquier otra obra de competencia municipal.

El Gobierno provincial enmarcaba la reunión mantenida ayer con los alcaldes en su "compromiso de establecer cauces de diálogo con los concellos para coordinar las acciones". Algunos regidores aprovecharon el encuentro para preguntar sobre los criterios que regirán el reparto. La Diputación, que todavía no los ha concretado, asegura que serán "objetivos". Otro punto de interés fue el destino de los 3,1 millones en ayudas nominativas consignadas por el anterior Gobierno y aún pendiente de aprobación. La Diputación sostiene que se sumarán a los 30 millones del PAS.